PORTADA: Chris con la cara llena de furia y las manos atadas por unos grilletes dejándose caer desde un balcón.

Suben y bajan sobre el metal chafado. Levantan placas intentando mirar bajo ellas. La tristeza va apareciéndose en sus caras conforme pasa el tiempo.

- ¡Eh, aquí! ¡Chicos, he encontrado a Max!

El rostro del hombre esta completamente bañado de sangre que emana cual brote en un bosque de las múltiples heridas de su cara. Su aspecto es bastante turbio. Su cara sucia refleja el dolor que siente su cuerpo al completo.

Poco a poco los astronautas se dan reunión junto a su cuerpo.

- Vamos a intentar sacarte de aquí Max -le dice Alexandre tranquilizador.

Sin contar con sus compañeros Adams se adelanta y remangándose el mono se arrodilla junto a Max echando mano a la placa que le hiere.

- ¡Vamos! ¡Echadme una mano!

Todos asienten y toman también la plancha de metal.

- A la de tres arriba... una, dos y tres -tirando del metal.

Con algo de esfuerzo son capaces de quitar de encima de Max Botach el rectángulo de acero que le dificultaba el movimiento y la respiración.

Sin que los vean los chinos, con sus uniformes rojos se acercan a ellos. La mujer, la única que sabe hablar inglés actúa de portavoz, pese a lo sorprendente que resulte su acento, gramática y pronunciación es casi perfecta.

- Saludos -tendiendo su mano- soy Yuu Min, comandante de la Zedong XI. Al igual que vosotros hemos atravesado esa luz y hemos venido a dar aquí.

- Sa... saludos -le toma la mano Alexandre.

Chris gruñe levemente y les dirige una mirada asesina.

- ¿Por qué coño nos segui...? -se ve interrumpido por la mujer china.

- Creo que dadas las circunstancias lo mejor será que ambas expediciones colaboremos. No tenemos medio por el cual avisar de nuestra situación y no sabemos tampoco donde hemos ido a parar.

- Si no nos hubierais jodido el nuestro a lo mejor hubiésemos tenido suerte ahora... -murmura Adams.

- Lo sentimos, pero teníamos ordenes claras de nuestro gobierno.

- ¡A vuestro gobierno me lo paso yo por...! -de nuevo se ve interrumpido.

- Creo que eso es un asunto que deberá solucionarse entre los políticos cuando lleguemos a la Tierra.

- Creo que vuestra propuesta es de lo más inteligente. Alexandre... ¿y si ayudamos a Max? Aun sigue ahí tirado.

- ¡Ups! Si, vamos.

Entre Alexandre y Angelina levantan al experto suizo en telecomunicaciones y lo ayudan a ponerse en pie.

- Mi nombre es Alexandre, estos son Max, Christopher, Angelina y Salvador. -señalándolos uno a uno- Faltan dos compañeros.

- Yo soy Yuu Min. Mis ayudantes son Shoji Shui y Xie Ann.

Traducido del mandarín:

- Saludad -mirando a sus compañeros.

Acto reflejo los dos astronautas restantes inclinan su cuerpo hacia delante a modo de saludo.

- ¿Os ayudamos a buscar a vuestros amigos?

- Por favor.

Mientras Yuu da explicaciones a su tripulación los europeos y americanos prosiguen la búsqueda. Pronto la tristeza aumenta en un 100%. Con la boca abierta permitiendo la salida de sangre, cortes por todo el cuerpo y los ojos abiertos de par en par, atravesada por algún hierro que otro el cuerpo sin vida de Lillian Buchanan.

Alexandre se sienta allí mismo mirando al suelo. Conforme todos van viendo el cadáver imitan a su líder. A Dos Passos se le saltan las lagrimas.

- Lilly...

- Tranquila Angie -poniéndole una mano sobre el hombro Salvador.

La mujer se le abraza ahora sin intentar contener su llanto. Alguna lagrima se desliza también por las mejillas de Alexandre y de Pacheco.

- Bueno, ya solo falta encontrar a Will.

- ¿Qué bien que Lilly esté muerta no, Chris? Así nos ahorramos trabajo -dice Angelina dolida.

El resto de astronautas contemplan la discusión sin intervenir.

El chico se da la vuelta y niega con la cabeza pasándose la mano por el pelo.

- Si eso, corre, peinate, no vaya a ser que venga tu novia a buscarte y no estés en condiciones.

Chris se gira con cara de pocos amigos.

- ¡Mira estupida, me sabe igual de mal que a ti que se haya muerto! ¿Te piensas que no siento? ¡Tan solo soy realista y veo que no nos podemos quedar aquí llorando su muerte hasta que nos muramos nosotros también porque así en la vida regresaremos a la Tierra!

- No creo que haga falta que la insultes Chris... -interviene Salva.

- ¡Tú cállate! -señalándolo con el dedo.

- ¿Me vas a obligar? -apartándose de Angelina.

- ¿Por qué no? -encaminándose hacia él.

Alexandre se interpone en su camino y mira serio, duro a los ojos del joven militar. La bondad y apacibilidad de sus ojos desaparece dejando paso a una frialdad casi impropia de él.

- Quieto.

- ¡Déjame pasar Alexandre! ¡Le voy a cerrar la boca a ese idiota!

Los asistentes se quedan perplejos. El acto es casi inimaginable viniendo del francés. La torta le gira la cara a Chris que apoya su mano en la mejilla y mira sin una expresión definida a su superior.

- Te estás comportando como un crío, si queremos salir de aquí, ese comportamiento debe erradicarse.

Todo el mundo sigue con la búsqueda de William Silver salvo Chris y Alexandre que permanecen de pie el uno frente al otro, sin moverse.

- ¿Continuamos trabajando?

- Si... -algo incrédulo tras la torta.

Cada uno camina para un lugar diferente. A la llamada de Marcel, Chris se gira.

- Siento lo del golpe.

Adams vuelve a su tarea sin decir nada.

El cadáver de Silver es encontrado poco después por dos de los chinos que avisan corriendo a base de señales a los miembros de la AME.

Aprovechando los pequeños incendios dentro de los restos de las naves crean una pequeña hoguera que les proporciona calor frente a la helor del ambiente.

- La luz no es necesaria. Por algún extraño motivo, suponemos capacidad propia del planeta, la vegetación desprende una especie de destello azulado, algo más claro que el color del suelo que proporciona ayuda a la visibilidad.

Va a haber que buscar algo de comida... las provisiones que hemos rescatado de las naves no creo que dure más que un par de días si respetamos las raciones.

Tarragona (España)

Una mujer de cabello pelirrojo esta sentada en el sofá de su apartamento mirando atónita la televisión y escuchando las palabras pronunciadas por el preocupado locutor.

Traducido del catalán:

- Los dirigentes de la AME han difundido un comunicado oficial en el que confirman desconocer el paradero de la nave Bush II desde hace casi 24 horas. No dan señales de vida y se cree que hayan podido sufrir algún tipo de accidente. No obstante dicen confiar en que la tripulación, si sigue viva, consiga ponerse en contacto con la base de la Agencia Mundial Espacial que trabaja sin descanso en la localización de la nave. Les mantendremos informados, Lluis Francino, TV3, corresponsal en Estados Unidos.

La chica acaricia su barriga y nota como su cara se va humedeciendo por las lagrimas. Pronto rompe en un doloroso llanto y abraza un almohadón.

Unas huellas ciertamente extrañas se van dibujando en la superficie azul, los pies de las pisadas tienen cuatro dedos, los dos centrales muy largos y los otros dos, cortos y curvos.

La piel de los seres es escamosa y dura. El color de esta es similar al rosa, pero en tono deslucido y varia su intensidad según el espécimen. Cada cual diferente. Algunos más rosados, otros más rojizos... En sus manos, con tan solo dos dedos portan rifles láser con los que apuntan a los astronautas en la distancia.

No emiten ruido alguno y se acercan con cautela a los científicos que duermen apaciblemente en el suelo.

Cada vez están más cerca de ellos.

Burdeos (Francia)

Un hombre mayor aprieta con fuerza la camisa entre sus manos tomando la tela de la zona del corazón. Camina tambaleándose hasta poder apoyarse en la mesa.

Un hombre más joven entra en la habitación y corre con su padre al verlo en tal situación.

- ¿Qué sucede papá? ¿Estás bien?

- Tu... -respirando cansado- tu hermano... su nave... no saben donde esta...

- ¡¿Qué?! Bueno... tranquilo -poniendo el brazo de su padre sobre su hombro- ahora debes relajarte un poco, ¿entendido?

Las piernas le fallan y cae al suelo, acto que condiciona un grito de su hijo que corre a llamar una ambulancia.

Chris abre los ojos para contemplar como le apuntan a bocajarro con el cañón de uno de los rifles.

- ¿Qué co...? -perplejo.

Uno de los extraterrestres se lleva un dedo a la boca en posición vertical indicando silencio.

Sede de la AME (Cabo Cañaveral)

- ¡Maldita sea! ¿Quieren decir que no encuentran el rastro de la Bush II? ¡¿Qué va a pasar con esos hombres?! La opinión publica se va a conmocionar y nos culparán a nosotros... ¡Quiero que en menos de dos horas tengan alguna novedad sobre la misión o están todos despedidos! -fuera de si, desanudándose la corbata con dificultad.

- Pero señor...

- ¡Ni peros, ni leches! ¡He dicho dos horas Sullivan, dos horas! ¡Más vale que usted y su equipo tengan algo pronto o ya sabe donde van a ir a parar: debajo de un puente!

El directivo sale del despacho y quien se queda dentro hace un boquete en la mesa de roble al dar un puñetazo sobre su escritorio.

Los astronautas de diversas etnias y culturas caminan uno tras de otro con la cabeza gacha siendo apuntados con armas de alta tecnología capaces de atravesar el cuerpo de una persona en cuestión de un abrir y cerrar de ojos.

La voz de la vida autóctona es muy aguda pero se torna todo lo contrario cuando adoptan el dialecto inglés.

- ¡Vamos, vosotros, caminad rápido! -el que parece el cabecilla de la tropa. Tras horas de largo y pesado caminar por el desierto, con las caras de cansancio e incertidumbre ven como ante ellos se alza majestuosa e imponente una gran ciudad que nada tiene que envidiar a Nueva York, Londres o Barcelona.

Los edificios cuentan con doce plantas de alto el que menos. Los debosianos van por las calles vistiendo trajes de neopreno. Aunque pudiese resultar extraño ni siquiera se inmutan al ver desfilar a los terrícolas siendo amenazados por miembros de su casa real.

El edificio al que se dirigen destaca del resto. Frente al estilo vanguardista que premia en la ciudad este se asemeja al estilo colonial. Con la fachada pintada en color pastel y con ornamentaciones por doquier resalta ante los colores azul y negro predominantes. Hay seres como los que les apuntan con sus armas por todos lados.

La seguridad en la casa es espectacular. Cientos de hombres armados morando en cada esquina. Ellos caminan como las ovejas, mirando al suelo y siguiendo al grupo encabezado por uno de los extraterrestres.

Finalmente entran en una sala de forma oval en el centro justo de la cual los detienen y los hombres de armas se hacen a un lado. Al alzar la mira, frente a ellos, inmenso y señorial pueden observar un trono tallado en obsidiana sobre el cual se sienta un ser similar a un lagarto híbrido con hombre. Piel azulada con detalles blancos. Sobre su cabeza una corona negra con diamantes incrustados. Alza la mano mirando a los astronautas.

- Az'korok, monarca del Planeta Dabos os saluda terrícolas.

- Saludos... -consigue articular Alexandre.

- ¡Maldita criatura inmunda! ¡Suéltanos! -grita Christopher indignado.

A los gritos del americano la guardia del rey Az'korok alza sus armas y apuntan con ellas a él. El monarca niega con la cabeza.

- Bajad las armas mis fieles. No deseo dar muerte a nadie.

Sus compañeros miran a Adams en gesto de orden de silencio.

- ¿Qué os trae por aquí?

- Nuestras naves se accidentaron.

- Vaya... así que un accidente...

- Nos gustaría saber... -interrumpe Yuu- si podríais devolvernos de vuelta a la Tierra.

- No -rotundo.

Las expresiones de los extranjeros denotan preocupación y miedo.

- Entonces...

- Como todo extranjero que viene a parar a Debos pasáis a ser mano de obra esclava. -se dirige a sus súbditos- Llevadlos a las mazmorras. Que los adecenten y les pongan sus harapos correspondientes. Luego llevadlos al mercado y pedid un mínimo de 20 fruds por ellos.

El líder del grupo asiente con la cabeza y vuelven a hacer desfilar a los astronautas. Antes, les colocan unos grilletes en las manos para desesperación de Chris.

- ¡Que os jodan! -dando un codazo a uno en la cara.

Con suma agilidad alza su pierna hasta golpear a otro en la cara y luego echa a correr. Algunos soldados le persiguen hasta que salta por un balcón a la calle. Se escuchan algunos disparos y gritos de alerta pero finalmente consigue huir del palacete y mezclarse con la multitud.

Sus compañeros se miran algo contrariados, sin saber si la huida de su amigo les iba a influir.

- ¡Vamos! -más serio todavía- A las mazmorras.

Camina esquivo y zigzagueante por las calles de una gran y desconocida ciudad. Se escabulle entre la gente y evita las miradas.

Entra en lo que parece una tasca. Allí se encuentra con unos cuantos habitantes del planeta algo ebrios al haber bebido demasiado de una sustancia verde y viscosa que contienen sus vasos de tubo.

El camarero lo mira.

- ¿Desea algo, fulano?

- ¿Vende ropa? -quedándose a poco menos de un palmo de él y viendo una pistola que sobresale de su funda en el cinturón.

- No... solo sirvo licores.

Casi de improviso, rápido y audaz toma la pistola del licorero y le apunta con ella. Es blanca y con el cañón muy delgado. Éste mira a su cuello.

- Dame la tuya. Y rompe mis grilletes.

Asiente con la cabeza. El resto de borrachazos miran la escena con serena paz. Hace lo que el americano le pide.

Chris salta la barra y tras de ella se viste con las ropas marrones y negras del camarero. Pantalones anchos, camisa y chaleco. Botas de caza. Se echa la pistola al cinto y coge unas cuantas monedas de la caja registradora.

Salta de nuevo la barra y sale del local encaminando algo más seguro las calles de la ciudad capital de Dabos.

EL CORREO FANTASTICO

Para poner a parir al guionista, para decirme que no os ha gustado el numero, para amenazarme de muerte... para lo que queráis.

Un número más de la serie que parece ser se va consolidando. Tiene algo más de acción que el segundo pero el plato fuerte lo tendréis en el próximo numero. Esperad a leerlo.

La raza habitante del planeta Dabos está inspirada en los Hombres Lagarto de Warhammer Fantasy y la ciudad es un poco a lo Star Wars. Espero que os guste.

No le cojáis mucha manía a Chris, es un poco gallito el chico... Y por el padre de Alexandre no sufráis que tan solo es un pequeño susto que le ha dado al hombre, nada grave.

Por ultimo un apartado que inicio en este correo, series que recomiendo, hoy toca The Ultimates, aunque algunos me mataran por recomendarla, creo que Zemo, Taker y T-Reilly hacen un gran trabajo.

¡Leed 2055! ¡Hasta el número 4!