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Ediciones El Loco del Fanfiction, con la colaboración de Marveltopia & "The End of the Road" presenta: DRAGON BALL Z

Dragon Ball Z

DRAGON BALL Z #2
Freezer Rex. Capítulo 2
Guión: Xumer y Ultrón

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Pueblo de Danku. 003 AF (Antes de Freezer).

- Okey, ¿estamos todos aquí?

Siete personas se reunían alrededor de una hoguera.

La que había hablado era una mujer que rondaría los veintitantos, con el pelo azul.

- Cada uno de vosotros guardará una de las siete bolas del dragón. El envoltorio electrónico que las recubre evitará que no emitan ningún tipo de radiación, así que de ninguna forma podrán ser halladas de nuevo con el Radar de las bolas.

Los siete hacen el solemne juramento de no descubrir nunca su respectiva bola.

- Al esconder las Bolas del Dragon impediremos que Freezer, Vegeta o cualquier otro alienígena invada la Tierra para conseguir la inmortalidad que estas conceden.- Proclama la única mujer presente.- Salvaremos a la Tierra.

Realmente fue una verdadera lastima que los héroes confundieran el objetivo de Freezer para ir a la Tierra.

No quería las Bolas del Dragón. No quería la inmortalidad.

Quería sangre humana.

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Pineapple City. 013 DF (Despues de Freezer).

Estamos dentro de uno de los aposentos mas lujosos del Palacio Imperial. Construido como sede de las "Fuerzas Benignas de Ocupación Extraterrestre", como les gusta llamarlo a los sectores humanos pro alienígenas.

Es una de las habitaciones mas lujosas por que pese a ser una raza guerrera aquellos de la raza de Freezer gustan de mostrar su categoría. Winter es el extraterrestre de mas alta graduación, después de Freezer.

- ¿Unión genética con esa escoria? puag...

- ¿A que se refiere, señor?- Pregunta Furball, su ayudante y mano derecha.

- La riqueza de este planeta es básicamente sus habitantes, fiel Furball, la composición genética de estos aumenta y potencia el nivel de cualquier raza con la que se cruce. El Emperador Cold designo a Freezer que investigase los efectos de estos experimentos sobre nuestra raza, pero realmente no tiene ningún interés en mejorar nuestra carga genética...

- ¿Y por que le encomendó a Freezer la misión?

- Después de su desastrosa derrota en el planeta Namec, Cold quiso humillarle encargándole una misión de este tipo. Imagínate, el hombre que había sido mas poderoso de la Galaxia, futuro heredero del Emperador, caído en desgracia y ocupándose de la administración de un pequeño planeta en medio de ninguna parte. Juas juas juas...

- Je je je...

- Y me encomendó a mí como segundo de a bordo para comprobar mi capacidad, seguramente espera que acabe con Freezer a la primera oportunidad que se me presente.- Afirma Winter.- Agradezco la oportunidad, aunque caído en desgracia Freezer sigue siendo algo así como una leyenda. El hecho de asesinarle me permitirá adquirir un prestigio considerable.

- Simplemente genial, señor.

Winter estaba enfrascado en su propio monologo y apenas prestaba atención a las afirmaciones de su lacayo.

- Oh, desgraciado Freezer, se dice que en Namec un formidable oponente le dejó en las condiciones miserables que ahora mismo esta. Literalmente la mitad de hombre de lo que era antes.- Continua Winter.- Quedo tullido de por vida y su oponente le humillo dejándole una vida de dolor y vergüenza, incapaz de mantenerse consciente sin su equipo de asistencia medica.

- Si, je je je...

- ¿De que te ríes, Furball?

- Lo siento, milord.

- ¡Estúpido!- Exclama Winter.- Aun caído en desgracia Freezer sigue siendo uno de los nuestros, de la elite, y como tal merece un respeto. Cuando lo mate le estaré haciendo el favor que su anterior contendiente tendría que haber cumplido. ¡Pondré fin a su humillación!

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002 DF. Dos años después de la llegada a la Tierra de las tropas del Emperador Cold.

Los invasores llegaron al planeta. Las tropas de Freezer eran realmente muchisimo mas poderosas que cualquiera de los ejércitos humanos existentes. Barrían a cualquiera que se les acercara.

No todos los países estaban involucrados en la Guerra, ya que algunos pensaban que la sed de poder de los alienígenas quedaría saciada con una pequeña parte del planeta.

Solo un lugar parecía ajeno a la invasión extraterrestre que se producía.

El palacio de Dios era un remanso de paz y tranquilidad. Una leve brisa susurraba entre las columnas. Solo una persona se movía en el paseo.

Con una escoba y muy lentamente dedicaba el tiempo a barrer poco a poco el camino.

Sus pensamientos se remontan a hace cuatro meses. Cuando toda su vida sufrió un cambio inesperado.

"Nunca olvidaré aquél día, el día en que todo cambiaría para mi amaneció con un bonito sol, ni la llegada de las tropas de Freezer al continente, ni la violencia que se había desencadenado en Pineapple y el resto del mundo podían enturbiar la luz del gran astro... Solo la llegada de Piccolo a petición de Dios hizo que la mañana de ese día me perturbara..."

- Aquí estoy, espero que sea urgente; tu mensaje telepático me produjo dolor de cabeza mientras entrenaba a mis hijos...

"Piccolo se envolvió en su capa. Hacía tiempo que no le veía, esencialmente era el mismo, pero pese a que no había pasado mucho tiempo le notaba muy diferente a nuestro último encuentro. Se le notaba mayor de lo acostumbrado. Mas maduro. Parecía mas viejo. Desgraciadamente me recordó demasiado a su difunto padre."

- ¿Tus hijos?- dijo Dios fijándose en tres figuras de aspecto parecido al namekiano que aparecen volando tras "su parte malvada".

- Trombón es el mas corpulento, Clarinete es el de la cola y ese de ahí mas callado es Piano... Mis hijos, mis discípulos, llámalos como quieras; son la defensa de "tu planeta".

"Dios oye como Clarinete suelta una risita infantil. Aun pese al innegable parecido con su padre le sorprende su enorme cabeza, similar a la de un Pedrodactilo. Trombón era grande, muy grande, aproximadamente el doble del tamaño de su padre, una sonrisa proporcional a su cara aparece en su rostro."

"Y Piano era del tamaño inverso a Trombón. Muy muy pequeño, de un color mucho mas claro que sus dos hermanos. Y al contrario que estos no tenía alas para volar."

- Veo que has heredado las preferencias que tenía tu "padre" para poner nombres.- Afirma Dios.

"Dios estaba muy seguro de si mismo, en mis años de servicio nunca le había visto tan vivo en una situación tan delicada como la que ahora vivía la Tierra. Yo seguía callado, como casi toda la mañana."

- Los humanos deben comenzar a tomar decisiones, Gokuh murió y sois pocos los guerreros lo suficiente poderosos como para enfrentaros a los hombres de Freezer. Pero a lo largo de los años he aprendido que la naturaleza del hombre le lleva a complementarse con alguien, es decir, necesitan ayuda, una unión.

- ¿Que tratas de decir?- responde Piccolo de forma casi violenta.

- Continuamente te enfrentas a los hombres de Freezer, arriesgas tu vida, si mueres yo también lo haré, junto con las Bolas de Dragón, que son la última defensa de los humanos, la ayuda a la que me refiero.

- No te entiendo, si no hablas claro yo no...

- Hablo de acabar con la conexión que tenemos.

- ¿Fusionarnos? ¿Cómo cuando lo hice en Namek con Neil?

- Tu poder aumentó cierto, pero el no era parte de ti, como lo soy yo. Pero no, no hablo de una fusión. Eso no ayudaría mucho la verdad... Verás, Piccolo Sr. y yo éramos un mismo ser, pero al engendrarte, aunque lo hizo con toda su esencia, perdiste parte del Namek original que fuimos; la fusión no sería completa.

- Sigo sin entenderte, viejo.

- Mr.Popo,- Dios se gira hacía mí- has servido bien durante años, ahora debo pedirte un favor... Te conozco y te pido por favor que escuches atentamente. Para bien o para mal, las Bolas de Dragón deben seguir existiendo, si Piccolo o yo morimos dejaran de existir.

- Al igual que el señor Piccolo no entiendo.

- La cámara del tiempo y el alma, en verdad fue creada con otro fin; Para encerrar a Piccolo Sr., seguiríamos viviendo, pero en cierta forma nuestras "conexiones" deberían desaparecer, seriamos uno independiente del otro.

- Creo que se lo que quieres decir -Picccolo bajó la cabeza, cerró los ojos y sonrió.- Si te aíslas dentro de la sala del tiempo y yo muero, la bolas seguirán existiendo, los humanos tendrán un defensor menos pero no perderán las bolas.

- Correcto.- Asiente Dios.

- Dios... ¡¡¡¡No puede!!!! ¡El mundo le necesita!

- Dada la actual situación el mundo no necesita un Dios, si no un guerrero. Quiero que seas tu quién rompas la puerta de la sala Mr.Popo...

- ¿Yo? no puedo hacerlo... No quiero.

- Significará un nuevo comienzo para ti, al romper la puerta romperás con el pasado.

- Dios, eso significaría destruir toda mi vida.

- Si, para empezar una nueva. Deberás hacerme otro favor, también. Cuando hayas destruido la puerta vete del palacio. Solo será un recuerdo, un lugar al que acudir cuando la situación lo requiera; cuando alguien esté herido, se quiera entrenar a solas, etc... Una vez te vayas quiero que enseñes lo que te enseñé yo en su día. Solo eso.

- Volveré a ser el único Namek en la Tierra- dijo Piccolo.

- Siempre ha habido solo uno- Dios sonrió.

- Pero con la marcha de los Namekianos... Me sentía a gusto con ellos.

- Parece que no sea Piccolo el gran rey de los demonios quién habla.

"Perdí toda esperanza de que las ideas de mi señor cambiaran cuando este se dio la vuelta, dirigiéndose a la sala que aislaba a todo ser de nuestro mundo, entonces pensé en que pasarían años, puede que cientos, hasta que la situación se normalizara, él nunca tendría conciencia de eso. Un día en la Tierra es un año en la sala... La soledad de Dios sería eterna. "

- Adiós Mr.Popo, Piccolo...

- Dios...

"El Namekiano que durante siglos ejerció como Dios del planeta Tierra soltó su vara, seguidamente comenzó a subir los blancos y relucientes escalones que llevaban hasta la puerta de la Sala del Tiempo y el Alma. La puerta se cerró tras un gran golpe."

- Mr Popo?- pregunta Piccolo.

- Señor, yo... No, no puedo.

- ¡Se ha sacrificado por este planeta! Si ahora llegaran Freezer y entrara en la sala no serviría de nada ¿Quieres estropearlo?

"Mr.Popo cerró los ojos, no podía evitar que las lágrimas brotaran de estos. Alzó su brazo en dirección a la puerta, concentrando frente a la palma de su mano una esfera energética que seguidamente lanzó sobre la puerta, quedando esta destruida. Tras los restos solo se podía distinguir una habitación de un metro cuadrado, vacía."

- Ya está,- dijo Piccolo colocando su mano sobre el hombro de Mr.Popo- es hora de marcharse.

"Los "hijos" de Piccolo se adelantaron y salieron volando."

- Debo servirle a usted... Son la misma persona, déjeme acompañarle.

- Tienes una misión, como yo; entrena a todo aquél que tenga potencial, haz de los humanos los guerreros que necesitan ser.

"Piccolo salió volando, alcanzando a sus hijos al instante... Y dejándome totalmente solo."

- Durante unos cuantos meses seguí adelante con mi vida, llevando a cabo las tareas normales de mantenimiento que hacía cuando él aun estaba aquí -. Piensa el narrador de la historia.

Finalmente Mr. Popo suelta su escoba.

- Pero el mismo Dios sabía lo que hacía cuando me pidió que destruyera la puerta. Sabía que era la única forma de que yo mismo rompiera con mi pasado y tomara consciencia de mi propia nueva función.

Mira a su alrededor por última vez.

- Adiós, palacio...

Sube a una alfombra y desaparece súbitamente.

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Palacio Imperial. Pineapple City. 013 DF. El Presente.

Una figura encapuchada avanza en total silencio por el corredor. A veces se cruza con alguna patrulla de soldados extraterrestres, pero es tal su pericia que cuando esto ocurre simplemente se funde con las sombras para evitar que le vean.

Un hombre normal, terráqueo al cien por cien, arrastra una larga capa blanca. Tenía pelo a lo afro y largos bigotes morenos. Y bastante tripa.

Al llegar hasta donde estaba el enmascarado este se descubre.

- Eh, ¿quien eres?- pregunta Mr. Satan.

El enmascarado no responde. Al menos no con palabras.

- Ah, eres el medio saiyajin... Tu rescataste a mi hija. Durante los primeros meses de la invasión...

El enmascarado asiente.

- ¿Que quieres? ¿por que estas aquí?

Ninguna respuesta.

- ¿El torneo?

Silencio.

- ¿Quieres participar en él?

Asiente.

- Tendrás problemas con los análisis de sangre, los genecistas de Freezer se encargan de controlar que todo aquel que participe sea humano al cien por cien.

El enmascarado señala al humano.

- ¿Quieres que yo falsifique las pruebas? Eso es muy grave, aunque sea Gobernador de la Ciudad de Pineapple me matarían si se enteran...

Silencio.

- Vale, lo haré. Después de todo estoy en deuda desde que salvaste de Bidel, y mr Satan siempre cumple su palabra...

El enmascarado desaparece de nuevo en las sombras. Mr Satan, pensando en el enorme riesgo que tendría que llevar a cabo por una deuda de honor, continua su camino.

- Maldita sea...

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006 DF. El pasado.

- Escucha lo que te digo, Gohan. La leyenda ha resucitado -comienza a narrar un aprendiz de ninja a otro.- La primera noticia que tuve de él desde el entierro, debió de pasarlo muy mal. Cuando el Duende Tortuga me contaba leyendas sobre el sangriento Yuma no podía creérmelas. Ha causado ya cien muertes al menos, he contado al menos veinte aliens, pero la mayoría son humanos. La firma de sangre que deja en los pueblos y ciudades que visita es clara: COBARDES.

Son Gohan asiente a su interlocutor y compañero. Ambos estudiaban de forma constante las técnicas ninjas.

- Se que debe ser duro para ti, Gohan, después de todo es tu abuelo.- Continua Yamsha.- Pero has de tener en cuenta que su hija murió con la llegada de los primeros aliens, el deber de estos era solo observar (Freezer no obtuvo suficientes datos sobre la Tierra cuando Vegeta y Nappa la visitaron), necesitaban datos como la población, la fauna, la geografía de los distintos lugares... Murió rápidamente, pero estaba acompañada, nadie la ayudó. En verdad todos fueron unos cobardes...

- Yuma...- Susurra apenado.

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003 DF. Seis meses después del exilio de Dios.

Tres personas misteriosas se reúnen en una llanera solitaria. Llueve.

- ¿Porqué me has traído aquí, Tortuga? ¿y quién es tu extraño amigo?

El duende Tortuga estaba al lado de un encapuchado, no mas de metro y medio, algo regordete. Frente a él estaba el Duende Grulla, hace años compañero de entrenamiento. En tiempos mas recientes: enemigo mortal. ¿En la actualidad?

- Permíteme que me presente. Mi nombre es Popo... Mr.Popo si lo desea- dijo quitándose la capucha que cubría su cara.

- ¿Debo impresionarme?- Contesta escéptico Grulla. Al igual que para el Duende Tortuga, el tiempo apenas parecía hacerle mella.

- Deberías - dice el Duende Tortuga sonriente.- ¡Ha servido al Dios de este planeta durante años!

- Así es.- Afirma Mr. Popo.- Ahora, como el me pidió, quiero que vosotros sirváis a la causa. Fue su última voluntad. Os pido que volváis a abrir vuestras escuelas, enseñad el arte de Mutaito a las personas que os encontréis. Yo ya he comenzado... Necesitamos elevar nuestras esperanzas en esta lucha.

- No somos tan poderosos - dice Grulla.

- No todos los Aliens deben ser tan poderosos como el tal Freezer, al menos la gente estará preparada para lo que se nos hecha encima. El factor del número es nuestro, ahora elevemos el factor fuerza - el Duende Tortuga se mostraba firme ante Popo y Grulla.

-¿Esto es un si? ¿Aceptáis abrir las escuelas?

Los allí presentes se dieron la mano y partieron cada uno por su lado. La isla del Duende Tortuga había sido devastada, al ser detectada por scouters, mientras Ten Shin Han y el Duende estaban allí. Los dos guerreros habían logrado sobrevivir a duras penas. Se hicieron prometer que nunca mas serían vulnerables...

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Palacio Imperial. Pineapple City. 013 DF. El Presente.

En la habitación mas importante del palacio hay un extraterrestre enganchado a varias maquinas.

Un hombre que es la sombra de lo que fue. Un ser moribundo, lleno de odio y bilis. El ronroneo de las maquinas le impide por completo dormir, por que es el sonido que le recuerda que depende de ellas para vivir, que le recuerda su honor mancillado.

Él es el promotor del nuevo Torneo. Sabe que eso atraerá a todos sus enemigos... Les llevara como fichas de ajedrez moviéndose según sus designios por el tablero. Ingenuos ellos que se creen dueños de su destino.

Les moverá a su antojo solo para ser aplastados por su puño.

Continuara...

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Cartas a Capsule Corp

Este capitulo fue escrito hace mucho tiempo conjuntamente entre Ultron y yo. Por un despiste mío no llego a ser publicado.

La serie en teoría debería ser retomada por uno de los dos, pero no veo del todo claro que eso vaya a suceder, así que bien podría este ser el último número. Si alguien esta interesado en retomarla que contacte con ambos y le ponemos al día.

XuM.

 
 
   
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