PORTADA: Peter Parker de espaldas en un callejón mientras ve a Kaine apoyado en la pared chorreando sangre por la boca. Al lado de Kaine pone: "Kaine ha vuelto, ¿qué querrá esta vez?.

Peter y Betty llevaban una hora esperando por sus maletas después de haber aterrizado en el aeropuerto de Londres. Habían ido a la ciudad londinense por una conferencia sobre genética. Betty cubriría la noticia y Peter sacaría fotos.

Se hospedaron en un hotel bastante decente (Peter había esperado un cuchitril debido a la tacañería de Jameson) y fueron directamente a la conferencia que se celebraba en un palacio de congresos que estaba lleno hasta los topes de científicos, periodistas...

Las dos primeras horas de conferencia habían transcurrido sin ningún problema pero cuando las dos horas se fueron convirtiendo en tres y luego en cuatro tanto Peter como Betty tuvieron problemas para mantenerse despiertos.

"Venir aquí ha sido una gran idea" piensa Peter que ahora mismo desearía estar con Mary Jane. "Por lo menos Reed Richards me ha dado un suero que me permitirá mantener mis poderes en perfecto estado, no es una solución definitiva pero estoy seguro de que algo encontrará, para eso es el mayor científico de la Tierra".

"Guiado por un sueño, sonaría ridículo para cualquier otro. El caso es que llevo varios días sin descansar sólo por venir aquí, a este lugar perdido en el mundo. ¿Qué habré hecho yo para merecer todo lo que me ha pasado?. Probablemente nacer, nacer en un tubo como el clon de Peter Parker, como Kaine".

Apartó varias ramas más que le cortaban el paso. Habría preferido ir por las ramas pero quería conservar las pocas fuerzas que le quedaban porque sabía que habría problemas. Apenas unos días antes había escapado de la Bóveda después de haber soñado con la muerte de Ben, todavía no podría creerse que estuviera muerto. También se había enterado de la reaparición del Duende Verde, el original, Norman Osborn, ¿cómo demonios había hecho para sobrevivir?, debería haber muerto cuando su deslizador lo empaló contra la pared, incluso lo había visto muerto, bueno, Peter lo había visto muerto y enterrado.

"Y también sé que Norman mató a Ben, lo vi en mi sueño como otras muchas cosas. Cuando acabe con esto, Norman será mi objetivo".

Desplazándose por los bosques llegó a un descampado y lo que vio le dejó atónito, había un templo en mitad del bosque y nadie parecía haberse dado cuenta de su existencia. El templo parecía haber sido sacado de la Grecia antigua pues su forma se asemejaba bastante a las antiguas construcciones griegas.

Kaine se acercó al templo y pasó un campo de distorsión que se dispersó a su alrededor.

"Así evitan ser vistos desde el aire pero si no quieren ser vistos no comprendo por qué no tienen un mejor sistema defensivo"

Como respuesta a las preguntas de Kaine varias armas surgieron del suelo todas apuntando hacia Kaine. Dispararon. Kaine no se dejó sorprender y ágilmente consiguió esquivar cada uno de los disparos hasta llegar a la puerta de entrada del templo y la empujó para abrirla.

Entró y vio que en realidad el templo era mucho más de lo que aparentaba. La sala donde estaba seguía pareciendo un antiguo templo, sin embargo al final de ésta había una puerta de un ascensor que debía comunicar con algún túnel subterráneo.

Kaine avanzó despreocupado hasta que una voz habló:

- Kaine, no te está permitida la entrada en este templo sagrado.

La voz no provenía de la sala donde se encontraba. Su autor debía de estar en alguna habitación oculta.

- ¿Quién eres?.

- Mi nombre no importa, sal ahora y vivirás, quédate y... morirás.

Kaine inspeccionó visualmente el interior de la sala. Estaba bastante oscuro con lo que no podía distinguir si había alguna persona escondida.

Se dirigió hacia el ascensor, sin embargo antes de llegar se topó con una figura oscura salida de la nada, era un Scrier.

- ¡Vosotros!. ¡Habéis estado detrás de todo desde el principio!

El Scrier no habló y se lanzó al ataque. Kaine ya se había topado antes con los Scriers y sabía que eran una secta religiosa que adoraban a un líder secreto y también sabía que eran simples humanos.

Kaine se agachó y cogió al Scrier en brazos apretando lo suficiente como para que no se solara. Sin embargo el Scrier se libró de los brazos de Kaine con relativa facilidad.

"¿Cómo?"

- El Scrier que ves aquí ha sido mejorado. Un regalo de nuestro señor.

El Scrier volvió al ataque esta vez con una gran velocidad que Kaine no pudo igualar y por tanto recibió una mansalva de puñetazos y patadas que lo tiraron al suelo.

Kaine se levantó y se lanzó al ataque. El Scrier lo esquivó saltando sobre él pero Kaine ya no estaba sorprendido y reaccionó con la agilidad de una araña y golpeó con una patada por la espalda al Scrier que cayó al suelo inconsciente.

Antes de que diera un paso decenas de Scriers salieron a su paso.

"Maldición, esto se pone cada vez peor"

La niebla es un ejemplo típico de lo maravillosa que es la ciudad de Londres, siempre que no estés allí porque ahora Peter Parker se estaba congelando debido al frío nocturno. Hacía varias horas que debía haber conciliado el sueño pero tenía algo más importante que hacer, debía buscar información sobre Norman Osborn.

El pensar es Norman le produjo un escalofrío. Su mayor enemigo había vuelto después de mucho tiempo, habían sido años en los que había pensado equivocadamente que Norman Osborn, el padre de Harry, el Duende Verde había muerto. No es que no tuviera otros enemigos, Veneno, Matanza y demás eran adversarios formidables pero Norman era... el peor. Él le había hecho lo que ninguno había conseguido: arrancarle un trozo de su alma, porque cuando Gwen murió algo de Peter murió con ella, su inocencia se había perdido para siempre.

Con la muerte de Norman días después había conseguido apaciguar sus ansias de venganza pero ahora que estaba vivo los viejos recuerdos volvían a su mente, la cara de Norman cuando se había quitado su máscara, la caída de Gwen, la muerte de Harry... todo volvía a la mente. Quizás esa fuera la venganza del Duende Verde, no dejarle olvidar que no había podido salvarla.

"Deja de analizarlo todo Parker y ponte a trabajar, para eso has salido, ¿no?". Peter se sumergió en la niebla nocturna y se fue hacia las calles más oscuras y de peor reputación de la ciudad. Lo que vio allí le dejó helado, prostitutas, drogadictos, la lista era enorme, y qué hacía él por ellos. Nada. Se quedaba quieto, mirándolos o pasando de ellos.

"¿Qué puedo hacer yo por ellos?. Ellos lo han elegido libremente". Pero eso no era verdad y lo sabía, ninguno de ellos había querido estar donde estaba, simplemente los habían empujado "como la muerte del tío Ben me empujó a ser Spiderman".

Se acercó a un local bastante concurrido por gente "poco recomendable" donde había un matón muy gordo en la puerta. Cuando Peter intentó entrar el matón se puso delante.

- ¡Fuera! -gruñó-. Este sitio no es para ti.

- Quiero pasar.

- Me temo que no es posible -dijo el matón mientras hacía crujir sus dedos amenazadoramente-.

Peter no pudo evitar sonreír, había tratado con bastantes tipos como éstos durante su carrera heroica así que sabía perfectamente lo que hacer.

Usando su fuerza arácnida cogió al matón por el cuello y lo levantó unos centímetros del suelo.

- ¿Decías? -preguntó-

- Uggh... puedes... pa...s...ar...

Peter lo soltó y cayó al suelo como un fardo.

- Muchas gracias.

Entró dentro. El local era como mucho el mejor que había visto de los seis que había visitado anteriormente. Al contrario que los otros, en éste todos los invitados vestían con traje de etiqueta y el ambiente era de trabajo, aquellos tipos estaban en la alta alcurnia.

Se dirigió hacia la barra donde un camarero le escrutó con la mirada.

- ¿Va a tomar algo?

- Quiero ver al dueño.

"Esto cada vez se parece más a una película policíaca mala".

- No está aquí.

"¿Pensabas que te iba a decir que sí Parker?. Reconócelo, no eres 007".

- Tengo un negocio que proponerle.

"Le vendo tres ositos de peluche a cambio de información, ¿le parece?. ¡Sé más original Peter!".

- A mi jefe no le interesan los negocios.

Su sentido arácnido zumbó y Peter dirigió su atención hacia el hombre que estaba a su izquierda, su mano sostenía una pistola con silenciador. Cuando el camarero volvió a hablar su voz sonó más amenazadora.

- Hemos estado recibiendo soplos de que alguien está haciendo preguntas sospechosas, por raro que parezca viste igual que tú.

"A ver si voy a ser yo". Como Peter no respondía el camarero empezó a lanzar miradas a sus hombres.

- Aquí no nos gusta la gente que hace preguntas.

El sentido arácnido volvió a activarse y Peter vio a cinco hombres a su alrededor.

- Y ahora nos va a acompañar a la puerta trasera, tenemos algo que enseñarle.

Peter sonrió, los cinco hombres se le acercaron. Peter saltó de su asiento y cayó detrás de los cinco hombres, a los que derribó uno por uno teniendo cuidado de no pasarse. Cuando acabó con los cinco se dirigió hacia el camarero.

"Realmente soy durísimo".

- Te lo preguntaré una vez más, ¿está tu jefe?

- Detrás de la barra hay una puerta, entra.

Peter sonrió y se dirigió hacia dentro. "Ha salido bien, creo que le estoy cogiendo práctica a esto de ser un superhéroe, ¡ya era hora!". Entró por la puerta y vio un largo corredor. Siguió andando intentando dar la impresión de ser un tipo duro que no se arrugaba ante nada. Llegó al final del corredor y abrió la puerta que allí estaba.

Tres hombres musculosos le cerraron el paso nada más entrar.

- Pensé que le había dicho a Charlie que nada de visitas.

La voz no procedía de ninguno de los tres matones que tenía delante si no de un hombre pequeño que se sentaba al fondo y que tenía una pistola en la mano.

"Muy bien Peter, a ver si no metes la pata"

- Hizo una excepción. Estoy buscando información sobre Norman Osborn.

- No sé de dónde eres amigo pero aquí la información se paga y no creo que tú tengas algo que ofrecer.

- Quizás, tengo un amigo fuera al que no le importaría nada entrar en tu local y destrozarlo.

Todos comenzaron a reírse de Peter, la verdad es que como amenaza no era muy buena.

- Mis chicos se ocuparán de él. Sin embargo tú me interesas, he visto como te deshacías de cinco de mis chicos sin ningún problema, podría trabajar para mí.

- Lo siento no me interesa pero quizá ahora te arrepientas.

Peter se dio media vuelta y se fue del local. Miró por todos los lados y cuando estuvo seguro de que no lo veía nadie trepó hasta la azotea de un edificio donde se vistió con su traje de Spiderman, el que había vestido Ben Reilly antes de morir.

"Va a ser la sexta vez que te use esta noche, ¿por qué los mafiosos siempre son tan difíciles de convencer?".

Cuando estuvo preparado guardó su ropa y saltó a la calle en dirección al local.

"Allá voy"

- JERÓNIMOOOOOOOOO

Entró derribando la puerta y tumbando a dos matones. Todos miraron hacia él.

"Les he pillado por sorpresa".

Su sentido arácnido se activó y Peter lanzó su telaraña para atrapar a cinco hombres. Luego comenzó a saltar de un lado para otro.

- Quédate quieto -dice un hombre con una pistola-. ¡Así no hay quien apunte!

- No es por criticar pero no me gusta que me disparen.

Saltando sin parar va derribando uno por uno a todos los que se le ponen en medio, esquivando sus disparos y golpeándolos con sus puños y piernas.

- Ahora veréis.

Adhiriendo su mano al techo cambia rápidamente de dirección y tumba a cinco hombres de una sola patada. Salta hacia la barra y derriba al camarero de una patada.

- ¡Lo que hace el alcohol!

Derriba la puerta y se dirige hacia el jefe que ha llamado a siete hombres armados hasta los dientes.

- Siete contra mí, no me parece justo para vosotros chicos.

Comienzan a disparar pero Spiderman cubre todo el pasillo con una telaraña. Los siete hombres se miran y van hacia la telaraña que se desprende, aparareciendo Spiderman y golpeándolos y dejándolos inconscientes.

Su sentido arácnido se activa y Spiderman salta justo a tiempo de esquivar un disparo.

- ¡No me pegues!, por favor.

Spiderman se vuelve hacia el jefe del cocal que se esconde temerosa tras una mesa volcada.

- Tranquilo, sólo quiero saber una cosa, ¿qué sabes de Norman Osborn?

- No lo conozco -tartamudea-. No sé de quién me hablas te lo juro...

"Llevo siete locales visitados y en ninguno han oído hablar de Norman Osborn, ¿por qué?".

Spiderman se fue. En una esquina un hombre hispano sacaba un transmisor.

- Ha estado aquí.

- ¿Ha preguntado por Osborn?

- Sí.

- Esto se complica cada vez más. Síguele pero que no te vea.

- Entendido.

"Diez locales desalojados, más de veinte mafiosos de la ciudad y ninguno sabe nada de Norman Osborn, es extraño, Norman me dijo que se había establecido a lo grande en Europa¹, lo normal es que los mafiosos supiesen algo sobre sus actividades tanto legales como ilegales. No encaja, hay algo que no encaja".

Siguió andando pensando qué era lo que andaba mal en todo esto hasta que se encontró con un hombre apoyado en la pared que estaba vomitando.

- ¿Se encuentra bien? -preguntó Peter mientras se acercaba-.

Cuando se acercó pudo reconocer la figura, era Kaine y tenía mal aspecto, su traje estaba roto por varios sitios, sus heridas emanaban sangre, su cara estaba magullada y estaba vomitando sangre.

- ¿Qué te ha ocurrido?

- Peter... tem... scr...

CONTINUARÁ

Próximo número: ¿Qué quiere Kaine de Peter?. ¿Quién ha seguido a Peter y cómo no lo ha detectado su sentido arácnido?. La respuesta dentro de un mes.

1.- Se lo dijo en Peter Parker: Spiderman #75.

DAILY BUGLE

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