PORTADA: Dividida la portada en dos, en la mitad derecha tenemos la correspondiente mitad de la máscara sonriente de Ogun y en la izquierda la de la cara de Kitty, reflejándose en la pupila de su ojo el rostro colérico de Kylun.

El mundo está lleno de historias terribles. Aquí, en la puerta de Rashomon, vivía un demonio, y dicen que se fue porque tenía miedo a los hombres.

Akira Kurosawa, Rashomon,

Afueras de Tokio.

El sol ilumina los verdes campos - a Coloso le queda la escalofriante sospecha de que el césped es artificial, pero no la expresa en voz alta - de Tokio que comienzan cuando la jungla de asfalto y plástico que es la capital de Japón termina. La nave con la que Excalibur se ha desplazado hasta el país desde Inglaterra para rescatar a su compañera Katherine Pryde de la posesión del demonio ninja Ogun¹ se posa en el punto indicado por Fuego Solar, que desciende junto a la misma. Coloso, Kylun, Viajera Diurna y Rondador Nocturno se unen a él segundos después, dejando el vehículo en camuflaje holográfico.

- Por lo que he podido saber la primera escuela de Ogun, que debió fundar a finales del siglo XVI o principios del XVII. Pocos historiadores que hayan estudiado con tanta minuciosidad la época se atreven a darle fecha a su nacimiento o su muerte.

- ¿Estas diciendo que Ogun es una figura conocida en la Historia de Japón? - pregunta Rondador con curiosidad.

Shiro niega con la cabeza. Se mantiene en vuelo a un metro escaso del suelo. Rondador y Kylun están desenfundando ya sus espadas por pura precaución, tres el elfo - una con cada mano y otra con la cola - y dos el viajero dimensional. Coloso, por contraste, se mantiene en su forma humana. Amanda también aparenta relajación, permanece ajena a la conversación. Con los ojos entrecerrados, casi en trance, parece estar "midiendo místicamente" la zona. Fuego Solar da unas parcas explicaciones antes de centrarse de nuevo en la misión:

- La zona de las ruinas era un templo budista zen que fue destruido durante los bombardeos de la II Guerra Mundial. Los monjes que no murieron prefirieron marcharse. Por lo que sé llevaba en decadencia mucho más tiempo de lo que el más viejo de ellos podía recordar.

El armatoste de lo que en su día fue un edificio ahora es un cascarón vacío, una casa sin techo, el esqueleto de lo que debió ser.

- Si mis sospechas están fundadas, allí es donde nos enfrentaremos con Ogun.

Rory Campbell vierte el contenido de una probeta en el interior de un vaso de precipitados. Cuando un vendaval abre la puertas del laboratorio de par en par se le derraman un par de preciosas gotas, pero la fuerza imparable que ahora mueve a Moira Mactaggart no lo deja reaccionar, su compañera lo sujeta por las solapas y lo levanta prácticamente en el aire. Rahne recoge la muleta antes de que toque el suelo. Moira grita, eufórica, agitando un disquete:

- ¡La tenemos²!

El salón es de un aire regio desposeído, colmado de elementos civiles que lo republicanizan, sin excesos ni adornos. La bandera de Renania y el Pelícano que representa su símbolo nacional la decoran en la pared del fondo y apenas la ocupa una mesa rectangular y unas cuantas sillas, además de varias cajas cerradas con celo. En una de las sillas, apartada junto a una pared, se encuentra sentada una joven pelirroja de pelo corto y complexión atlética, se encuentra pensativa. Dos hombres maduros y corpulentos, uno alto y barbudo, otro más chaparro y con poco pelo en la coronilla, la acompañan, están de pie y parecen también meditar gravemente.

- Realmente estamos en un aprieto. La presidencia nos proporcionará protección durante unos meses, pero si perdemos las elecciones nuestras cabezas tendrán precio - dice el más alto.

- A la comunidad internacional le somos indiferentes. El PDD se ha presentado como el partido de la convergencia con Europa. No podemos recurrir a nadie para que nos ayude a salir de esta trampa. Pero me niego a quedarme cruzados de brazos esperando la derrota.

- Existe alguien que si querría ayudar a Judith. - sugiere la chica³.

Shiro Yoshida lleva un kimono que consigue datar en la Era Meiji. Shiro Yoshida no tiene poderes mutantes. El tatami está caliente. Frente a él hay una mujer joven, hermosa, la reconoce. Su postura es antinatural, su mirada cruel. Sentada sobre un trono de cáñamo, con las piernas cruzadas a la india, Kitty Pride extiende sobre sus rodillas una katana de hoja pulida y reluciente. Sonríe con cierta suficiencia.

- Atacarme en mi propio territorio es una estrategia simplemente suicida. Ser japonés no te da ninguna ventaja, Yoshida, samurai caído. Debisteis traer a mi antiguo alumno, Lobezno. Era vuestra única posibilidad.

Shiro mira a su espalda. Al fondo de la sala, ante dos panelas deslizantes entre abiertos, se encuentra Kylun. No hay rastro del resto de Excalibur. El viajero dimensional desenvaina las espadas gemelas de Zz´rath.

- Es mi deber derrotarte, monstruo.

Ogun se sacude dentro del cuerpo de Gatasombra con una risita desdeñosa. Shiro es consciente ahora de que Rondador Nocturno se encuentra encadenado en una de las esquinas de la sala, y a su lado hay una mujer inclinada, con un tocado de geisha, a la que no se le ve la cara. Asume que es Viajera Diurna.

- Deber. ¿qué es el deber? Dímelo tú, Fuego Solar. ¿No te fuerza el honor a suicidarte mediante el ritual del hara-kiri?

- Seppuku.

- Por supuesto no te das cuenta de que a nuestros invitados occidentales se les escapa la diferencia, ¿verdad? - se vuelve hacia Rondador, que parece mudo -. Hara-kiri es un vulgarismo, la traducción más aproximada a vuestro idioma gaijin sería "rajar barriga". Deberíais unirte a mí, Fuego Solar. Tu causa, en tus comienzos, fue la misma que la mía.

- No tienes causa. No luchas por nada. Eres sólo un fantasma.

Kitty/Ogun se pone en pie blandiendo su arma. Kylun, accionado por su propio resorte interno, salta sobre su oponente, pero sus aceros son detenidos por un hábil mandoble. Kitty retrocede un par de pasos con un barrido de su katana, obligando a Kylun a contenerse.

Rondador se revuelve haciendo tintinear sus cadenas. Shiro descubre que no puede moverse, está de pie, en el centro del tatami, sin su traje de Fuego Solar, sin poderes. ¿Qué artimaña del demonio es esta? El edificio parece reconstruido completamente. Si pudiera asomarse al porche observaría un Tokio decimonónico, está seguro. Pero el poder de Ogun no es tal. No es más que una ilusión.

Kitty tropieza, un de las espadas de Kylun se clava en el suelo a escasos centímetros de su estómago. La katana de Ogun hiere el antebrazo de su leonino adversario, la gemela izquierda se desliza por la superficie del tatami casi hasta lo pies de Rondador Nocturno.

¿Por qué la mujer no se mueve y lo ayuda? Está arrodillada, no puede verle la cara, sólo la parte trasera de su tocado, adivinando sus formas bajo el kimono. La nuca queda al descubierto, es casi una pose provocativa - para los japoneses la nuca viene a tener la misma carga erótica que para los occidentales la piernas -, ¿se trata realmente de la acompañante de Excalibur?

Rondador se revuelve de nuevo, continúa sin hablar, intenta alargar uno de sus pies de dos dedos para atrapar entre ellos la empuñadura de la espada. Kitty da un puñetazo en la mandíbula a Kylun, lo hace trastabillar de nuevo, él la sujeta por una muñeca y poniéndole un pie en el estómago la hace girar sobre si misma, desarmándola. Kylun aún mantiene una de sus espadas. La katana de Ogun está al alcance de Fuego Solar. Kylun apoya la punta de su arma en el pecho de Gatasombra/Ogun.

- Ya hemos repetido esta situación varias veces. No merece la pena pronunciar una amenaza que no se está dispuesto a cumplir.

- Rompiste el hechizo de mis espadas. No dañaban nada malvado. Si se mantuviera, quizás podría atravesar el cuerpo de mi compañera sin herirla, pero matándote a ti en su interior. De hecho me siento tentado de hacer la prueba. Probablemente Gatasombra sospechó, al entregarse a ti, que llegaríamos una y otra vez al mismo callejón sin salida. Tomó su decisión. Al fin y al cabo, mientras continúes ocupando su cuerpo, está muerta a efectos prácticos.

- No lo harás.

La punta de la espada se hunde unos milímetros en la carne, sobre la clavícula derecha, haciendo brotar algo de sangre y contrayendo el rostro de Kitty/Ogun en una mueca de dolor. Kylun permanece impasible, pero Rondador, mudo, intenta liberarse casi desesperadamente mientras hace aspavientos.

- Agh - se queja la voz de Katherine Pryde.

Shiro se ha sentado sobre el tatami cruzando las piernas y colocándose las palmas de las manos sobre las rodillas. No puede moverse de donde está, pero puede cambiar de posición.

- Es un dilema interesante. Si utilizas los poderes de Gatasombra para volverte intangible (aunque a lo mejor ya no puedes, por lo que tengo entendido necesita tomar aliento antes), podrías escapar, pero para ello debes anular el hechizo que nos impide a Rondador y a mí utilizar nuestros habilidades. Probablemente Rondador se enfrentaría a Kylun para salvar el cuerpo que habitas, ¿quién sabe? Divide y vencerás. Pero yo podría quemarlo contigo dentro, y Rondador no puede detenernos a los dos. Además, es posible que a Kylun si le resultase difícil eliminar a dos de sus amigos para tener que acabar contigo, pero a mi no me importan ninguno de los dos.

BAMF

La segunda de las espadas gemelas de Zz´rath se opone ahora a la primera, Rondador se interpone entre Kitty y Kylun. Sus cadenas han desaparecido.

- Kylun, no. La atraparemos, como hicimos con su padre. Encontraremos la manera, recurriremos al Dr. Extraño.

La máscara de Ogun sonríe. La punta de la espada de Kylun aún está clavada sobre su clavícula. La hoja gemela la roza apenas por encima. Rondador no puede obligarlo a que retroceda sin arriesgar a herir él mismo a Kitty. Ante la sonrisa de triunfo de su enemigo, Kylun le hunde la espada atravesando el hombro. De nuevo es la voz de Kitty la que chilla de dolor. La mujer ataviada de falsa geisha parece salir de su letargo. No se trata de viajera diurna, sino de una mujer japonesa, sin ceja, que se levanta chillando y armada con un puñal corto, con la empuñadura lujosamente decorada. Salta sobre la espalda de Kylun, pero una sombra azul la derriba haciéndola rodar y Rondador reacciona a tiempo de herirla en una pierna, haciéndola quejarse en dialecto japonés con ruidos de animal herido.

- Got in himmel! ¿Yukio? ¿Eres tú?

La ninja se ha agazapado en una esquina del tatami. Contesta a Rondador mientras salta hacia Ogun, que ha aprovechado la confusión para derribar a Kylun con una patada en la entrepierna y arrebatarle la misma espada que uso para herirlo.

- Me crucé a vuestra compañera hace dos días⁴ la llevo siguiendo desde entonces, y también a Fuego Solar. Lo que no sé es cómo he llegado hasta aquí.

Kitty la golpea en el estómago con el brazo malo, el izquierdo, mientras mantiene a raya a Rondador con el derecho, pero no puede evitar que un par de estrellas ninja se le claven en la espalda.

- ¿Y qué puedes querer tú de mí? - interviene Fuego Solar, que ha recuperado su traje de superhéroe y lanza una llamarada destinada a desequilibrar a Ogun.

Con la pierna derecha abrasada, Kitty intenta esquivar dos golpes más de Yukio, uno de los cuales le acierta en la mandíbula.

- Nada indecente, una oferta de trabajo.

- No soy un mercenario que venda sus servicios al mejor postor.

- ¿Ni siquiera como servicio a tu país?

Kitty/Ogun, ya desarmada, con la herida del hombro sangrando, una estrella aún clavada en el omóplato, dos costillas rotas, una pierna con quemaduras de tercer grado y un moratón en la mandíbula intenta aún defenderse de otra patada en el estómago de Yukio.

- ¡Basta!

Dos manos grandes y metálicas sujetan por los brazos el cuerpo de Kitty Pride y lo elevan del suelo del tatami. Ogun patalea.

- Nnnooo, tu no puedes estar aquí.

Una melena castaña se mueve antes sus ojos, Amanda Sefton sonríe y dibuja varios símbolos en el aire con los dedos.

- La paliza que acaban de darte ha perjudicado bastante tu concentración, y el cuerpo blindado de Piort es anatema para las entidades místicas, por eso, igual que a mí, trataste de apartarlo de la batalla. Entre los dos podíamos derrotarte.

- No abandonaré este cuerpo. Tendréis que matarlo.

Coloso aumenta la presión sobre los brazos de su prisionero/prisionera.

- Sólo puedo imaginar el dolor que debes estar pasando. Y el que supondría tener los brazos rotos.

- Lo comparto con tu amiga.

El edificio se descompone a ojos vista de Excalibur y sus aliados, hasta que regresan a las ruinas originales, quedando a la intemperie frente al aguacero que ha comenzado a caer mientras luchaban.

- Tú la entrenaste, ¿cuanto podéis aguantar?

- Eso ya no importa - interviene Amanda.

Muestra un frasco del tamaño de un vaso pequeño a la concurrencia mientras pronuncia un último hechizo. El cuerpo de Kitty queda completamente rígido entre los brazos de Coloso, luego humo empieza a salir de sus lagrimales, su boca y sus oídos, hasta transformarse en una nube diminuta que vagamente imita una silueta humana, y se va introduciendo pacientemente, aunque con cierta resistencia, en el recipiente. Amanda cierra el frasco con flema, contemplando la niebla rojiza que se mueve nerviosa entre sus paredes de cristal. Ogun es ahora el diablo dentro de la botella. Kitty se desmaya, por lo cual Piort recupera su forma humana y la acomoda entre sus brazos acunándola como a un bebé. Amanda ofrece el recipiente a Fuego Solar, que lo recibe con precaución.

- ¿Sabrás que hacer con él?

- Sé que es justo que yo lo custodie. Mi país, mi vergüenza.

- Que dramático. Yo no me siento ofendida por los excesos de un fantasma - interviene Yukio.

Shiro contesta sin dignarse a mirarla, contemplando la botella.

- Eso es porque tú no tienes honor - permanece en silencio unos segundos, mientras Yukio parece quedar indiferente al insulto -. Sin embargo, te seguiré. Veamos que desean tus nuevos señores.

Kitty parece despejarse levemente y mueve la cabeza abriendo los ojos.

- ¿Peter? ¿Dónde estoy?

- Tranquila, Katya - contesta el ruso, poniéndole con delicadeza una mano sobre los párpados para volver bajarlos -. Debes descansar.

Kylun envaina por fin las espadas gemelas de Zz´rath a su espalda.

- No creo que hayan quedado purificadas.

Mientras Coloso se aleja bajo la lluvia llevando a Gatasombra la unidad médica, Rondador, completamente empapado y dolorido, al tiempo que atrapa a una Amanda que no ofrece mucha resistencia por la cintura con el brazo derecho, pone la mano izquierda en el hombro de Kylun y le contesta:

- No te ofendas, mein freund, pero ahora mismo eso me importa un bledo.

1.- Excalibur #111

2.- Moira llega directamente desde Factor-X #191. ¿adivinas que es lo que tiene?

3.- Xumifante para quién la reconozca. Aunque nada es lo que parece.

4.- Número anterior.

Próximo número: Tras concluir con la aventura japonesa, surgen las preguntas: ¿qué les ha ocurrido Brian y Meggan? Y lo más importante. ¿Dónde está Lockheed? Viajamos al mundo de los elfos para descubrirlo.

CARTAS A LA PERFIDA ALBION

Lo conseguí, desbloqueé otra serie. que yo mismo previamente había bloqueado. Bueno, algo es algo. Tras un montón de tiempo que no voy a molestarme en contar, por fin ha salido otro número de Excalibur. Creo que me ha quedado algo corto y los diálogos no son precisamente los más brillantes que he escrito en toda mi carrera, pero la excusa de la necesidad imperiosa de desbloquear este número para ser capaz de sacar los siguientes está ahí y no pienso desaprovecharla. Ya sabéis, dudas, sugerencias, etc. a tamborhojalata@hotmail.com

Saludos

Jose Cano