Miembros de Factor-X: Forja, Shard, Hombre Múltiple, Fortachón, Random, Noche, Lápsus, Terremoto, Mondo, Mente Maestra, Empática, Chica Ardilla, Electroshock, Comando, Mole, Mística, Siena Blaze y Cáliban.

Otros: Warlock y Doug Ramsey (fusionados con el Nido de las águilas), Riesgo, Ariel, Valerie y Chevil Cooper, Senador Kelly.

La historia hasta ahora: En los últimos números, hemos observado la división en grupos especializados de Factor-X. Anteriormente asistimos a su salto a la fama y a su conversión progresiva en un ejército mutante que ejerce como policía superpoderosa en EEUU. Se han enfrentado a Gámbito y a Cable, entre otros. Dominó, anterior líder de campo del Equipo Negro, dedicado a las operaciones secretas, desertó para unirse a éste último. También se encuentran en una extraña situación frente al Club Fuego Infernal. Ninguno ha hecho nada directamente –indirectamente es otra cosa- contra el otro, pero la guerra no declarada parece evidente. En X-Man #50 vimos como acababan por fin con los Jinetes de Apocalipsis con la ayuda de Magneto y de un grupo de hombres-x dispersos reunidos por Xavier, que ahora senador de los EEUU y ha cortado su lazos con la Patrulla-X. Durante el entierro de Nate Grey, que murió en la batalla, Shard advirtió a Cíclope, ahora profesor de Generación-X, y Moira MacTaggert, que ha disuelto Excalibur, que Factor-X teme que en cualquier momento el Gobierno lo obligue a actuar contra Neo Avalon, la nación mutante liderada por Magneto, o la Patrulla-X, convertida en un grupo clandestino que lidera Tormenta y financia Arcángel.

El joven Carter, ex-villano, miembro del Equipo Negro de Factor-X y dotado de fabulosos poderes eléctricos, se despierta a las siete de la mañana y se pone en pie rascándose el cráneo rapado. Tiene unas ganas irreprimibles de mear.

Entra en el cuarto de baño del pasillo somnoliento y el sonido familiar del chorrito apenas tarda unos segundos. Mientras se lava las manos, siente una presencia a su espalda.

- Hooola, Carter... -dice la voz aguda de Siena Blaze.

El chaval se encoge casi encaramado en el lavabo.

- Si... Siena, si... si nos tocamos provocaremos u... una explosión como la de Falls Edge¹.

La luz del cuarto de baño está apagada, así que Carter sólo intuye que ella está sonriendo. Nota como se mueve

- De esos se trata, idiota –Carter nota a través de la camiseta del pijama la presión de la mano de Siena, que lo sujeta y lo atrae hacia ella.

Los poderes de los dos empiezan a provocar chispas eléctricas en el aire. Si sus pieles llegan a tocarse... Un tentáculo tecnorgánico empieza a descender desde el techo. Las luces se encienden.

- Basta –Random, de uniforme, sujeta a Siena, una mano en el brazo que sostiene a Carter, otra en la nuca-. Suéltalo.

- Nnn, gilipollas –insulta ella.

Random la sacude, separándolos, y luego la arrastra hasta el pasillo, obligándola a permanecer de rodillas en suelo. Carter se escabulle y corre hacia su habitación. Siena levanta el brazo que tiene libre.

- Mira, llevo esto –enseña la pulsera anuladora-. No es peligroso, si lo toco así solo saltan chispitas.

Random no habla, sólo espera a oír el ruido del pestillo de la habitación de Carter. Entonces, suelta a su prisionera. Ella se pone en pie y le saca la lengua.

- Capullo... Cuando me escape te voy a reventar el culo.

Completamente inexpresivo, el antiguo cazarrecompensas se ajusta las gafas de sol, se da la vuelta y se marcha. Siena regresa a su habitación, murmurando insultos.

Siento su presencia un par de segundos tarde. Eso significa que, sea quién sea, es muy bueno.

Desde que me fusione con el nuevo edificio de Factor-X², provocando que Warlock y yo nos separásemos –y matando, de hecho, a Douglock³-, soy una especie de programa independiente, algo así como un antivirus consciente de si mismo. Si un pirata intenta entrar en los sistemas informáticos de Factor-X, lo sé antes que él mismo. A veces son chavales queriendo probarse, otras profesionales con menos habilidad de la que les gusta pensar, y, muy de cuando en cuando, espías de otras agencias. Ahora mismo, éste tiene que serlo.

Ya está dentro. Da vueltas sin mucho sentido, tanteando. Sabe que se encuentra ahora mismo en una trampa, un "simulación” de nuestros sistemas, donde lo dejaría toquetear un poco sin hacer realmente nada hasta echarlo cuando me hartase. Se marcha con facilidad, enfrentándose al primero de los cortafuegos de Forja. Podría deshacerme de él ahora mismo, pero quiero ver qué hace. Como esperaba, lo elude con facilidad. Aún le quedan un par de barreras que saltar antes de llegar hasta algo verdaderamente importante. Va muy rápido, eso sí, pero puedo esperar unos minutos antes de intervenir. Un momento, ya no estoy sólo.

Dougamigo, mi ha detectado intruso, mi necesario expulsar de sistema.

Espera un poco Lock. Es lo más interesante que nos ha pasado en un par de semanas, déjame que me divierta con él.

Mi confuso. Intruso denotar habilidad conceptual/algorítmica fuera de lo normal. Mi piensa contraproducente permitir mayor libertad de movimientos.

¿Qué quieres decir, Lock?

Mi considera probable intruso mutante.

¿Un mutante? ¿Cuyo poder le ayuda a ser un genio informático? ¡Eso es genial!

Mi disiente... Mi...

¿Lock? ¿Lock? ¿Ocurre algo? ¿Qué decías del pirata?

Hum... Creo que el ordenador ya no está en casa, ¿qué eres tú?

... tu peor pesadilla, supongo... pero puedes llamarme Cifra.

Muy gracioso Cifra. Tú puedes llamarme Hacker⁴.

Washington. Henry Peter Gyrich. Robert Kelly. Valerie Cooper. Sentados alrededor de una mesa de reuniones en una sala del pentágono a la que pocos tienen acceso.

- La captura de los Jinetes de Apocalipsis⁵ representa todo un éxito en la lucha contra el terrorismo mutante, Henry – está diciendo Val-. Es un tanto que puede anotarse la administración, capturar a los responsables de la masacre de Nueva York⁶.

El senador Kelly se muerde las mejillas y mira a sus papeles sobre la mesa. Gyrich se rasca la nuca.

- Con la colaboración de Neo Avalon. Y auspiciada por un senador demócrata. Que esta deseando que se le permite formar parte del CAS⁷. Y con una posición más que ambigua sobre ciertos temas.

- No vamos a admitir a Charles Xavier en el Comité Mutante –afirma Val, tajante-. No sé a dónde quiere ir a parar, Henry.

Gyrich se quita las gafas y se pasa una mano por los párpados cerrados.

- Los miembros de Factor-X... y ustedes dos –lo señala con las gafas- han mostrado cierta tendencia a hacer la vista gorda respecto a las actividades de algunos grupos mutantes cuya relación con Neo Avalon o Genosha no está nada clara y a los que el Gobierno de éste país considera como grupos terroristas.

Val busca la mirada de Robert Kelly, pero lo encuentra refugiado en sus papeles. Tras un segundo de desconcierto, la dra. Cooper aprieta los dientes y se centra de nuevo en Gyrich, que limpia sus lentes con un pañuelo de tela.

- Factor-X se ha enfrentado a la Resistencia Mutante y...

- Sabe perfectamente de lo que estoy hablando, Cooper. Hace unos meses Factor-X evitó investigar los repetidos atentados de la Patrulla-X contra sedes los Amigos de la Humanidad y el Ultimo Refugio de la Humanidad⁸.

- Eso no...

- Nadie aquí es idiota o amnésico –Gyrich se ajusta las gafas-. Las relaciones de los miembros de Factor-X con la Patrulla-X son de sobras conocidas...

Robert Kelly permanece enroscado en su silencio incomodo. Val intenta contestar.

- No estará insinuando...

- No insinúo, lo digo –Gyrich saca un portafolios y empieza a colocar fotos de la Patrulla-X encima de la mesa-. Ororo Munroe, aka Tormenta, líder del equipo, fue desprovista de sus poderes en una operación en la que ambos participamos, después de lo cual fue acogida por Forja en su base del Nido de las Águilas⁹. ¿Qué clase de relación hay entre ellos? ¿Es eso un impedimento para que si la Patrulla-X comete otro atentado?

- Escuche Henry, Factor-X...

Gyrich señala otras dos fotos:

- Alex Summers y Lorna Dane, Kaos y Polaris. Dos antecedentes del caso Dominó¹⁰ –Val intenta controlarse para no dar un puñetazo en la mesa y cortar el discurso del asesor presidencial-. Dos desertores de Factor-X a los que parece ser que más de la mitad del grupo no le apetece en exceso llevar a prisión, ¿no es así? Probablemente incluida usted. Por no mencionar que al guardaespaldas negro del senador Xavier, Bishop, se lo relaciona también con la Patrulla y con otro de los líderes de Factor-X, Shard. El mismo tatuaje y las mismas partidas de nacimiento inventadas... hasta hace un año y medio la mitad de éste departamento pensaba que Shard era un robot creado por Forja y no una persona... –ahora Val no puede evitar enrojecer.

Gyrich se detiene para coger aire. La boca de Valerie Cooper es sólo una fina línea. Casi puede oírse como chirrían sus dientes. Ya ni siquiera mira al Senador Kelly

- Factor-X está siendo muy rentable en términos tanto de seguridad como propagandísticos, ¿de acuerdo? Y queremos que continúe así.

Más de media hora después, de regreso al Senado, Val cierra de portazo la entrada al despacho del Senador Kelly.

- ¿Qué te pasa, Robert? ¿Estaba sola en esa habitación?

Kelly, que está sudando bastante y se ha desanudado la corbata, se sienta en su sillón, usando el escritorio de parapeto de protección. Sintiéndose tópico, saca una botella de whisky y dos vasos de un cajón.

- Tranquilízate, Val, por favor. Henry tenía razón...

- Ese imbécil de Gyrich nunca tiene razón... -Val pasa por alto los dos vasos, incluso que él se haya llenado uno casi hasta el borde, y empieza a caminar por la habitación, las manos enlazadas a la espalda, haciendo ruido con los tacones- Acusarme a mí de ser blanda con la Patrulla-X... si supiera como era todo antes, como han llegado a colaborar ambos grupos con mi consentimiento... Idiota.

- Val...

- Si por mí fuera... -Valerie se detiene y alza una mano- No quiero meter a Alex y Lorna en la cárcel, de acuerdo, pero de momento tampoco... Si les pidiese que se entregasen no serviría para nada... Detienen al Juggernautt y todo el mundo se fija en que Magneto pasaba por allí¹¹... -empieza a andar otra vez.

- Valerie, escúchame...

- Hay que tener paciencia... Xavier no sabe dónde se está metiendo, es más torpe de lo que cree –se detiene otra vez y suspira-. Bueno, no es tan malo. Abrir una investigación puede ser eterno, siempre hay problemas más acuciantes... Y la Patrulla-X no va a cometer un atentado terrorista que nos obligue a detenerlos esta misma tarde.

Con la mano temblándole, Robert Kelly apura el contenido de su vaso.

En el Nido de las Águilas, durante los diez segundos que dura la pelea entre Doug y Hacker, las luces parpadean, se pierde la señal de la tele y los ordenadores oscilan. En su taller, Forja frunce el ceño.

En su habitación, Shard está trabajando en la computadora. Lleva su uniforme de Factor-X, que es negro y con una equis blanca en el pecho, y para los miembros del Equipo Sabueso, que se encarga de las misiones policiales, incluye una chaqueta y un cinturón con kit de armas diseñadas por Forja. Precisamente de estos dos accesorios se ha librado ella, la chaqueta colocada en el respaldo de la silla y el cinturón abandonado encima de la cama. También lleva las mangas de la camiseta remangadas hasta el hombro y se ha quitado las botas, quedando en calcetines. Tiene un termo de café y una taza a medio vaciar sobre el escritorio, repleto de informes antiguos y algunos cedés.

Levanta las manos del teclado, sorprendida, cuando la pantalla se vuelve borrosa. Para ella la tecnología de principios del siglo XXI es como manejar palos y piedras, y teme haber estropeado algo por pedir demasiado a la máquina. Suspira al regresar todo a la normalidad. Da un sorbo al café, arrugando la nariz al comprobar que se ha enfriado. Va a coger otro informe del montón y continuar trabajando cuando dos enormes nudillos golpean en la puerta entreabierta de la habitación. Se trata de Guido, que muestra la mejor de sus sonrisas.

- Eh, guapa, ¿cómo va todo? ¿No sabes que mucho trabajo y nada de diversión hacen a Shardie aburrida?

El antiguo guardaespaldas no va de uniforme, sólo unos vaqueros, deportivas y una camiseta de tirantes blanca.

- No me llames Shardie –protesta ella, sin volverse a mirarlo pero sonriendo-. Pasa si quieres.

- En realidad pretendía sacarte. Necesitas algo de aire fresco y bailar hasta caer rendida.

Shard deja los papeles en la mesa y apaga la pantalla del ordenador. Gira el respaldo de la silla hasta quedar de frente a su compañero.

- Te lo agradezco pero no tengo ganas de salir.

Guido estira el labio inferior en un puchero y se pone una mano en el pecho.

- Hieres mis sentimientos. Vaaaamooos... Es una fiesta que dan unos amigos guardaespaldas. ¿No tienes ganas de que te presente aun montón de tíos macizos?

Shard sonríe con cansancio, luego se pone algo más seria.

- Guido, te agradezco... -medita un segundo- Entra y cierra la puerta, ¿de acuerdo?

Él alza las cejas y obedece, agachándose para pasar por el hueco de la puerta. Ella le indica que se siente en la cama, pero él hace un gesto de duda.

- No la romperás, Forja me dijo que todas las camas del edificio están diseñadas para soportar tu peso.

- Jejeje... -ríe, mientras se sienta.

- No te lo creas tanto, las encargó antes de repartir las habitaciones –de nuevo recupera el tono serio y se agacha, señalando al techo con un dedo-. Douglock tiene instrucciones de no grabar aquí... Escúchame. Me preocupa el Equipo Negro. Bueno, me preocupa todo el grupo. Quiero hablar con Forja y necesito que me apoyes porque eres el otro líder de campo y...

Guido ya ha abandonado completamente la guasa y le pide a su amiga con un gesto que lo deje hablar.

- Sólo me confirmas que necesitas relajarte, Shard. Mira, sé que lo de Dominó ha sido un poco¹²...

- ¡Ha sido la confirmación de lo que he estado advirtiendo! –grita ella, poniéndose en pie de un salto-. El Equipo Negro es peligroso. Y más si Mística va a ser ahora la líder. No podemos actuar bajo cuerda, ni entrenar supervillanos y no...

- Mira, en parte estoy de acuerdo contigo, no me gusta que Mística forme parte de nada que tenga que ver con Factor-X y sé que eso ya causó problemas mientras estuve en coma¹³, pero...

Shard crispa las manos en un gesto de impaciencia que hace a Guido levantarse de golpe.

- Oye, si quieres hablar conmigo tienes que dejarme intervenir en la conversación.

- Lo siento –murmura ella, sin mirarlo.

Sigue un silencio incómodo. Guido vuelve a sentarse.

- ¿Has estado en alguna sede del XSE? –pregunta ella.

- ¿Eh?

- Las minicomisarías mutantes que estamos repartiendo por todo el país...

- Je, ¿se llaman así? Perdona, pero ahora mi trabajo es casi todo publicidad. El otro día tuve que acompañar a Val a una fiesta que...

- Yo trabajaba en la XSE. En el futuro.

Guido retoma su seriedad.

- ¿Crees que estás en la paradoja del abuelo o algo así?

- No, no es eso... Yo trabajaba en las Xavier Security Enforces y ahora se llaman X-Factor Security Enforces... La cuestión es que no me daba cuenta entonces, pero que sólo los mutantes investiguen casos mutantes es...

- Apartheid.

- ¿Doug? –dice Forja- ¿Qué ha pasado?

El holograma se proyecta, Doug con el mismo aspecto que tenía cuando estaba vivo, el chavalito rubio con el traje de hombre-x azul y amarillo.

- No pasa nada. Ha sido divertido jugar con él, pero he tenido que echarlo cuando se ha puesto muy pesado.

- ¿A quién? –a Forja empieza a molestarle el tono de suficiencia que la personalidad de Doug ha ido adoptando de un tiempo a esta parte.

- No creo que haya que preocuparse... Aunque puede que tengamos un problema con el Club Fuego Infernal... Si lo pienso, es también bastante divertido... ¿Le he contado que descubrí que era mutante gracias a ellos, mr. Forja¹⁴?

Mr. Forja contiene un gesto de impaciencia.

Salón, un rato antes. Los Cachorros despiden a Fiambre. En concreto en estos momentos la que le da un abrazo es Maxine. Alrededor están Tat, Mondo, Carter, Patricia, Chevil y Mente Maestra, además de un Jamie Madrox y Noche.

- Eh, eh, no sobes tanto a mi novia –dice Tat, en tono de broma.

Van pasando por turnos, así que ahora le toca a Mondo:

- Me alegro de que nos acompañases en la última misión¹⁵, Manuel, y espero que tus clases con el Doctor Extraño te estén sirviendo para crecer como mago.

Se abrazan también, con sinceridad. En Mondo nada suena forzado o a lugar común. Van pasando hasta que quedan Patricia y Martinique. La empática también le da un abrazo, además de plantarle un beso en cada mejilla. Luego Manuel se dirige hacia Mente Maestra, que permanece con los brazos cruzados. Empática sonríe de medio lado mientras los dos Cachorros hacen gesto incómodos para darse dos besos de despedida.

La batalla entre Doug y Hacker los deja sin luz.

MUAC¹⁶

Vuelve la luz. Todo el mundo esta mas o menos donde los dejo el apagón, las únicas diferencias casi inapreciables al ojo humano, excepto que miren al techo y se pregunten que acaba de pasar, son las carcajadas contenidas de Patricia –se tapa la boca con una mano y todo- y el ligero rubor en las mejillas de Fiambre. Martinique se le acerca muy lentamente y finge darle los dos besos de rigor en las mejillas.

- Si dices algo o sonríes, te mato.

La habitación de Mística es de las más sobrias del edificio. Catre, estantería pequeña y una alfombra en el suelo. Que no le haga falta ropa hace que ni siquiera haya armario. Ahora mismo, la antigua líder de la Hermandad se encuentra sentada en la postura del loto, las piernas cruzadas y los codos sobre las rodillas, descalza y con un pantalón y una camiseta blancos, en su forma maestra, azul y pelo rojo, los ojos cerrados. Respira con intervalos regulares. Ni siquiera se ha dado cuenta del apagón.

Alguien llama a la puerta ruidosamente. Raven abre un ojo y compone una mueca de fastidio. Sin esperar respuesta, Mole abre la puerta y asoma su papada dentro de la habitación.

- ¿Por qué no tengo pestillo? –murmura ella.

- ¿Ha sido cosa tuya?

- ¿El qué?

- Ya sabes, jefa. Las luces.

- No sé de qué hablas, Dukes. Déjame en paz.

El villano cierra la puerta con decepción. Al fondo del pasillo, medio oculto entre las sombras de una esquina, lo observa en silencio Comando.

- No me irás a decirme que tú no quieres escapar, ¿verdad, Bohannon?

El semirobótico héroe de la Segunda Guerra Mundial se da la vuelta sin contestar y se marcha.

Taller de Forja. Tras el informe de Doug, el chamán indio está repasando las defensas informáticas de los sistemas del Nido a través de un servidor dentro de los circuitos de Warlock en el que espera que el fantasma del joven mutante no se dedique a husmear. Ciertamente, resulta irritante sentirte incómodo en su propio edificio. Una cosa es el alienígena ingenuo para jugar a HAL9000 y otra el niño-genio aburrido.

El teléfono en la línea de emergencia interrumpe su trabajo y su hilo de pensamiento. Con pulsar una tecla se despliega una pequeña pantalla en la que aparece Valerie Cooper.

- Tengo... tengo muy malas noticias, Forja. Ha empezado hace cinco minutos y Factor-X... es mejor que lo veas tu mismo...

Madripur. Una taberna de mala muerte llena de tipos poco recomendables que alquilan sus pistolas al mejor postor.

- Creo que no acabó de entender la idea, Dom –dice Cable.

Los dos están en una de las mesas, ante un par de cervezas, de paisano. Llaman la atención, aunque vayan en vaqueros, no sólo por el brazo robótico de él y el color de la piel de ella, sino porque se nota a ojo de profesional –y allí hay mucho- que van armados hasta los dientes.

- Yo creo que está bastante claro, Nate –responde ella–. Reclutamos un nuevo Grupo Salvaje (o cualquier otro nombre testosterónico que quieras ponerle) y volvemos al mercado. Los dos nos hemos saltado contratos muy importantes, y si queremos volver a trabajar tiene que parecer que lo hicimos "para algo”... Se supone que ahora llevo encima un montón de secretos de estado de los EEUU y los va a querer mucha gente. Tu no quieres que te rastreen hasta la nueva base de la Zona Azul¹⁷ y...

- Dom, cuando deje a la Resistencia Mutante... Escucha, mis objetivos han cambiado, Apocalipsis ha muerto, y ahora...

- Escúchame Nate, esta vez la que manda aquí so...

La conversación se corta cuando la tercera silla de la mesa es retirada por un extraño vestido con gabardina y un sombrero que le tapa la cara.

- Chicos –saluda.

- Kane¹⁸ –dice Dominó–. Muy amable por no traer a Vanesa¹⁹.

Cable bufa. El recién llegado retoma la palabra.

- No traigo muy buenas noticias. No sé si notáis la "frialdad” del ambiente –y abarca el local con un gesto. Ciertamente, todos los "miran sin mirarlos”.

Dominó alza una ceja, interrogante. Cable gira la cabeza para dar otro repaso al local, con tranquilidad y descaro.

- ¿Por qué somos leprosos? Todos han trabajado para el gobierno de EEUU en algún momento. Todos han roto contratos por "razones personales” –dice ella.

- Cuando rompes con Tío Sam con un puesto tan importante como el que tú tenías pasas a los más buscados –contesta Kane.

- Y ahí estamos.

- Dos semanas después de lo de Genosha.

- No podían hacer público mí...

- Dom... -interrumpe Cable-. ¿Cuántos agentes de SHIELD habrá aquí?

- Antes vi unos doce. Algo más de lo habitual.

- Si. Y hasta yo me he dado cuenta –dice Kane.

- Demasiado descarado. Y se toman su tiempo para ponernos la diana en la frente... -dice Cable, como si pensase en voz alta.

- Nadie quiere que lo vendan –continúa Kane-. Lo tuyo era un curro del que no se sale tan fácil. Y después de estar meses sin que nadie sepa de Cable y de que todo supiese que vivíais con la Patrulla-X.

Dominó mira su cerveza con el ceño fruncido y apoyando la cabeza en una mano.

- Maldita Valerie Cooper.

Dallas, Nido de las Águilas, sala de reuniones.

Forja preside la mesa. Todo Factor-X esta presente, los tres equipos, Estrella, Negro y Sabueso. Shard, Madrox, Guido, Random, Noche, Maxine, Tat, Mondo, Mente Maestra, Empática, Carter, Comando, Mole, Mística, y Cáliban. Con un añadido, Riesgo, que estrena traje de Factor-X. Además, la cabeza de Warlock cuelga del techo y un holograma de Cifra, que se ha adaptado al holograma un traje negro con x blanca en el pecho como el que llevan los demás.

- Tenemos que salir ya. Yo he tomado mi decisión que, en estos momentos, considero la menos mala. Pero no pienso obligar nadie a venir –dice Forja.

- ¿Vas a dirigir tú la misión?

- Voy a asumir la responsabilidad. Tenemos que irnos ya. Si alguien tiene alguna objeción o prefiere quedarse atrás, es el momento de decirlo –se pone en pie.

- Forja, eh... -empieza a decir Guido.

- Escucha. No sé que está pasando exactamente, pero se trata de una sede del XSE, ¿entendéis? A efectos legales, es como si estuviesen atacando este edificio. Es lo que parecerá en cuanto la televisión llegue allí. De una forma u otra, tenemos que actuar.

- Estas diciendo...- interviene un Jamie Madrox.

- Que hemos recibido orden de detener a la Patrulla-X.

¡No te pierdas el próximo número!

1.- Eso fue en Factor-X #175

2.- Factor-X #177

3.- Factor-X #186

4.- Uno de los jóvenes mutantes del futuro que se unieron a Cable en sus aventuras recientes en MarvelTopia, y que ahora trabajan para el Club Fuego Infernal.

5.- X-Man #50

6.- Nuevos Guerreros #79-81.

7.- Comité de Asuntos Superhumanos. Je :P.

8.- Durante X-Men #72-74, los Acólitos, a las órdenes de Sebastián Shaw, suplantaron a la Patrulla cometiendo varios ataques contra organizaciones racistas, pero Gyrich no distingue bien.

9.- En Uncanny X-Men #186-188, Muerte Viva.

10.- Kaos y Polaris desertaron en Factor-X #127, Dominó en el número anterior a este que estáis leyendo.

11.- Ver Patrulla-X #363.

12.- Desertó en... bueno, ya lo hemos dicho tres veces :P

13.- Guido estuvo en coma entre Factor-X #111-128. Durante ese tiempo fue la primera etapa de Mística en el grupo.

14.- La Reina Blanca intentó ficharlo para Los Infernales allá por Nuevos Mutantes #13. O no.

15.- X-Man #50, de nuevo.

16.- ¿Cómo es la onomatopeya de un beso húmedo con lengua? ¿Slurrpshh?

17.- No, no vamos a repetir lo de la deserción. Leed Cable #43 si queréis contextualizar un poco, pero que no es imprescindible.

18.- Garrison Kane, Arma X de MarvelTopia o algo por el estilo, antiguo compañero de Cable y Dominó en el Grupo Salvaje.

19.- Vanesa Carlysle, Copycat, actual novia de Kane y ex de Masacre (¡leed su serie!), sustituyó a Dominó en los primeros tiempos de Fuerza-X. No se llevan muy bien del todo.

CORREO GUBERNAMENTAL

Hace tanto que no sacaba un número que ni me acuerdo. Espero que los resúmenes del principio valgan para contextualizar un poco y la sensación no sea "¿pero qué leches pasa aquí?"

Dentro de nada, Factor-X #200, especial con 72 páginas, portada de Brian Hitch, póster central, calcomanías de los protagonistas en bikini (Guido y Forja, principalmente), etc. Pero antes, a leer Patrulla-X #364

A la espera de sus comentarios, queda su seguro servidor, José Cano.