HOMBRE DE HIELO VOL. 2 #10
Presentando a la reina de hielo
Guión: Xumer
Agradecimientos a Ultron por su inestimable ayuda
PORTADA: Bobby en su forma de hielo espalda contra espalda con una mujer identica a él, también formada de hielo. Él esta muy serio y levanta la mano, como preparandose a atacar. Ella se muestra coqueta, levanta la barbilla y mira por encima del hombro al lector.
Primera parte: El Hombre de Hielo.
Miro a Lev. Se que vamos a morir. Lamento todo lo que quisiera haberle
dicho, la situación me recuerda a una frase que oí decir a un cantante:
"No me arrepiento de nada de lo que hice. Si de las cosas que deje de
hacer".
Ojala hubiera tenido las agallas de...
La batalla comienza.
Una primera oleada esta simplemente destinada a medir nuestras fuerzas, ver
cuantos de nosotros seguimos aun vivos después del accidente y si hemos
conseguido crear unas defensas organizadas.
Les golpeamos con todas nuestras fuerzas. Ellos esquivan y se retiran con la
importante información. Gracias a los restos del vagon hemos creado una
especie de pequeña fortaleza.
La noche será larga.
Es curioso cuando crees que conoces a una persona. Yo creí que conocía a
Lev, pero nunca imaginé que la vería dirigiendo a todo un ejercito de
mutantes y resistiendo a un ataque tras otro. Hay un matiz de psicosis
cuando ladra sus ordenes.
A un joven chaval con el semblante de un pez le vuelan la cabeza cuando se
dispone a lanzar un ataque.
Agrom esta herido, pero salta fuera del circulo y aplasta a dos de los
jinetes enemigos con su brazo sano. Le abren un agujero en el estomago.
- ¡¡Agrom!!- un estallido de adrenalina recorre mi cuerpo. Como un resorte
dejo la relativa seguridad de nuestra "fortaleza" y salgo al exterior. Un
disparo me roza la mejilla. Creo una muralla de hielo entre Agrom y el
grueso del enemigo.- AAAAAAAAAAAARRRRRRGHHHHHHHHH...
Esta vez no me contengo. Utilizo mis poderes para congelar cualquier cosa
que se mueva delante mio, pero debido a mi imprudencia pronto recibo mi
merecido.
Salgo despedido y acabo levantando la vista. Afortunadamente alguien me
recoge y me deja caer dentro del fortin. Veo una cara familiar. Perfecta
Seera me mira consternada. Señala a algo en mi pecho.
Bajo la vista.
Me falta parte del pecho y un brazo entero. Entro en shock y mi cuerpo se
pone a temblar compulsivamente. Histerico me muevo hacía delante y atras.
Seera me abraza y se interna en mi mente con sus poderes telepaticos. Pese a
que le es dificil entender mi psique alienigena, consigue calmarme.
- ¿Estas mejor?- me pregunta.
- Si. Solo ha sido una crisis.
- Te necesitamos. Nuestra gente te necesita.- Dice.- He enviado un mensaje
telepatico y pronto llegaran los refuerzos. Solo tenemos que aguantar.
- De acuerdo.- Con el animo renovado me aproximo de nuevo al frente.
En una de las pausas que nos dan los invasores me concentro y recupero el
trozo de cuerpo que me arrancaron con la explosión.
Supongo que cualquiera de vosotros pensara que soy invulnerable. Que podría
yo solo cargarme a todos los malos.
Ni lo uno, ni lo otro.
Varias veces han volado la totalidad de mi cuerpo y normalmente no solo
pierdo la consciencia sino que los resultados suelen ser impredecibles. Una
vez apareció un enorme monstruo de hielo...
No puedo arriesgarme a que ocurra. Podría no despertar, o despertar
demasiado tarde.
Busco con la mirada a Lev.
Poco a poco van cayendo los nuestros.
Sabemos que solo es cuestión de tiempo que lleguen los refuerzos, pero los
enemigos parecen haber calculado bien el tiempo y mientras que vamos
sufriendo bajas ellos apenas son debilitados.
Hay un instante en el que levanto la vista por encima de las barricadas y
obtengo la certeza absoluta de que vamos a morir todos.
Todos.
Final de la historia.
Y luego simplemente el vació. Os confesaré mi último pensamiento:
- Mierda.
Segunda parte: Transición.
Perfecta Seera no era una guerrera.
Intentaba ofrecer algun alivio sumiendo a los heridos graves en un coma.
Ve desde primera fila cuando al Hombre de Hielo le revientan la parte
superior del torax y la cabeza.
El resto del cuerpo cae al suelo como un muñeco al cual se le cortaran los
hilos.
- ¡¡Bobby!!- Seera era literalmente la única del planeta que le llamaba por
su nombre propio y no como "Hombre de Hielo" o "Hijo de las Estrellas".
Coge el cuerpo y lo arrastra hacía el interior donde escondían a los peores
heridos.
- Bobby...- Vuelve a repetir lastimosamente.
Una pequeña ventisca se empieza a formar sobre su cabeza.
Tercera parte: Reina de Hielo.
Veo a Seera sujetando el cuerpo flácido de Drake mientras lloriquea.
Ella se da cuenta de mi genesis y dirige su mirada hacía donde mi hermoso
cuerpo de hielo se estaba creando.
- Bo... Bobby...- Dice tartamudeando.
Le miro con mi nuevo cuerpo.
- Es de mi agrado decirle que no soy su amigo.
- Pero... Pero...
- Si. Ya se que el parecido es inegable.- Le explico.- Pero podrá comprobar
que soy una mujer. A no ser que se tratará de un grave caso de travestismo
superheroico Robert nunca se atrevería a mostrarse así.
La pobre chiquilla me mira y mira al cuerpo de Drake. Luego vuelve a
mirarme.
- ¿Quien es usted?
- Oh, vamos, Seera. No me trates como si no me conocieras... Todo el mundo
tiene sus demonios internos. Yo soy el de Robert Drake.
Aunque pueda parecer insensible, de hecho no lo soy. Recuerdo la última vez
que viví una terrible perdida personal. A través de Drake he podido conocer
a estos entrañables monstruos que nos rodean y en cierta forma no sería
justo quedarme quieta mientras los masacran.
Ademas he de admitir una especie de sintonía con Perfecta Seera, supongo que
tiene que ver con el hecho de provenir ambas de familias de buena cuna y
algo elitistas.
Creo que incluso salvaré a Lev. Solo por ver si el estupido de Drake
finalmente reune el coraje de pedirle una cita.
Drake...
Ojala pudieras ver lo que hago con tus poderes, me muevo a velocidad de
vertigo, me infiltro entre las lineas enemigas, utilizo sus poderes en su
contra, ninguno de ellos llega a acercarse minimamente a mí.
Acabo despiadadamente con todos ellos.
Al amanecer hay mil estatuas heladas, antes personas, decorando esta sección
del enorme desierto.
Seera me mira sorprendida.
Me mira como si no me conociera, como si fuera un precioso angel
exterminador caido del cielo para salvar su vida y las de sus miserables
compañeros.
- ¿Que eres?
- Puedes llamarme la Reina de Hielo.- Le respondo.- Creo que me gustará este
lugar...
Fin de Capitulo.
MUNDO MUTIE
Sin cartas. Nadie me quiere.
Finalmente he conseguido superar el bache de este capitulo, que no sabía ni
como empezarlo ni como acabarlo. Puede que haya quedado un poco corto, pero
la verdad es que el resultado ha sido bastante satisfactorio.
Xumer.
xum00@hotmail.com