Joss C. Ryan AKA Marvel Kid: diecisiete años, moreno, ojos verdes, metro setenta y ocho, ochenta kilos. El protagonista. Vive con sus padres, Michael y Mary, y su hermano pequeño Chris.

Donna López: la novia de Joss. Hispana, cabello y ojos negros, metro sesenta, medidas de modelo: 90-62-90. Quince años. Su madre es una conocida cantante, que siempre está de gira. Vive junto a su asistente, una anciana negra a la que todo el mundo conoce como Granny. Se intentó suicidar hace unos días, y Joss la salvó llevándola volando al hospital.

Alyssa Douglas: la mejor amiga de Joss, de la que está enamorado. Dieciséis años, rubia, ojos castaños, metro sesenta y cinco, cincuenta y cinco kilos.

Luke Smith: el novio de Aly. Diecinueve años, motero, chupa de cuero, rubio, con perilla. Ha dejado el instituto, y trabaja de mecánico en el taller de su tío.

Peter Garrett: el mejor amigo de Joss. Dieciseis años, moreno, y extremadamente delgado. Es un auténtico fan de los superhéroes, y de los cómics. Nunca ha salido con nadie, y tiene pánico a relacionarse con la gente.

Mandy y Rachel: camareras de la cafetería Sonata, donde suelen después de clase. Una rubia y una morena, son ya parte del grupo.

From: JossCRyan@xaviernet.edu
To: JubiLee@xaviernet.edu
Topic: Holas!
Date: Dec 27 2001

Querida Júbilo.

Sé que hace tiempo que no te escribo, desde que te conté lo de la fiesta de Halloween, pero es que he estado muy liado.

Sí, ya lo sé, no tengo excusas. Mandar un e-mail no es algo en lo que se tarde muchas horas, pero la verdad es que tampoco he estado de humor.

¿Recuerdas lo que me pasó en la fiesta, lo del demonio y los dos tipos muertos? Aquello me convenció que tenía que esforzarme más en los entrenamientos. ¡Estuve a punto de morir! Si no llego a descubrir mi nuevo poder, lanzar rayos por las manos, no sé que hubiera sido de mi (si, ya sé que tengo que ir a que Mr. Cassidy compruebe la potencia de los rayos. En las fiestas de Pascua te haré una visita, ¿OK?).

Bueno, como te iba diciendo, desde entonces he estado entrenando aún más tiempo. Une eso a los exámenes, y poco tiempo libre he tenido. Y, claro, luego está Donna. Desde la fiesta hemos pasado aún más tiempo juntos. Sí, ya lo sé, sé todo lo que te he contado de ella (parece mentira la de cosas que se pueden llegar a contar en un chat, ¿verdad? A veces creo que te he contado toda mi vida), y sigo teniendo las mismas dudas sobre nuestra relación, pero... ¿qué quieres? Supongo que en el fondo también la quiero...

En fin, no hago más que irme por las ramas. Te escribo porque necesito desahogarme. Ha pasado algo. Algo horrible.

Todo empezó hace una semana. Estábamos en clase, en un examen de matemáticas. Ya te conté que para mi esas cosas no tienen secretos, así que a los veinte minutos ya había acabado. Como Mr Cross no nos deja salir, me quedé pensando, intentando hacer que el tiempo pasara más rápido. En fin, el caso es que me fijé en Aly, que se sienta a mi lado. Estaba preciosa, con el pelo recogido... Como me suele pasar, me puse a pensar en la posibilidad de que salieramos juntos. Ya sabes, mi cabeza no puede estarse quieta...

Entonces, de repente, se oyó un grito. Me giré. Era Peter. Estaba tirado en el suelo, con convulsiones, babeando. Mr Cross corrió a su lado. Nos preguntó si era epiléptico o algo. No lo sabíamos. La verdad es que, pese a ser uno de mis mejores amigos, apenas sabíamos cosas sobre él. Era muy reservado con según qué cosas, como si le avergonzaran o algo.

Mr Cross me dijo que fuera a buscar a la enfermera. Salí corriendo de la calse. Por suerte, todo el mundo seguía en sus aulas, nadie parecía haberse dado cuenta, así que salí volando (literalmente) hasta llegar a la enfermería, que, por supuesto, está en la otra punta del instituto.

La enfermera se fue corriendo mientras yo me quedaba avisando a una ambulancia, tal y como me había dicho. Cuando volví, habían tumbado a Peter en la mesa del profesor, y la enfermera le estaba dando un masaje cardiaco.

Le pregunté a Aly si sabía qué había pasado. Parecía un ataque epiléptico, pero apenas tenía pulso. Me sentía impotente. Soy muy poderoso, he derrotado a un demonio, pero no podía hacer nada por mi amigo.

La ambulancia llegó enseguida. Aly y yo nos fuimos al hospital con él. Se me pasó por completo avisar a Donna. Cuando llegamos, nos hicieron esperar en el pasillo. Llamé a su madre, y le conté lo que había pasado. Enseguida llegaron tanto ella como la hermana de Peter. Su padre había muerto años atrás, creo que en un accidente de tráfico. Tampoco las dejaron pasar. La espera nos estaba volviendo locos...

Por fin, salió una enfermera. Creo que era la misma que atendió a Donna cuando intentó suicidarse. Nos dijo que Peter estaba en coma, que había sufrido un paro cardiaco, pero que habían logrado reanimarlo. Aún no sabían lo que había pasado exactamente.

Pasamos a verlo. Estaba totalmente entubado. ¿Sabes? Preferiría no haberlo visto así. Es decir, es una mierda recordad a alguien de esa forma, postrado en una cama, entubado, sedado, pálido...

Aly y yo nos fuimos a casa. No podíamos quedarnos allí, y tampoco parecían saber cuánto iba a tardar en despertar... si es que despertaba.

A la mañana siguiente tuvimos que ir a clase, pero nada más salir, Donna y yo fuimos al hospital. Seguía igual. Su hermana nos dijo que parecía ser una de esas enfermedades raras, de esas de uno entre un millón. Los médicos aún no lo tenían muy claro...

Dos días después, el 23, despertó. Estaba débil, pero parecía estar a salvo. Los médicos dijeron que se tendría que quedar en observación durante varios días, y que después le harían pruebas. El caso es que todos respiramos tranquilos. Donna y yo le llevamos los comicsque tenía guardados en la tienda, para que se entretuviera. Estaba contento, hacía bromas y demás...

El caso es que Donna y yo nos fuimos. Al día siguiente cenábamos en mi casa. Su madre estaba de gira por Europa, creo, así que mi madre la había invitado a pasar la Nochebuena en casa...

Donna llegó por la tarde, y ayudó a mi madre en la cocina, mientras mi padre, mi hermano y yo preparábamos la mesa.

Entonces sonó el teléfono.

Y, no sé porqué, supe lo que era.

Era Rachel. Había ido a visitar a Peter y se acababa de enterar.

Peter había muerto.

La verdad es que las siguientes horas están confusas. Sólo recuerdo mantenerme sereno, consolar primero a Donna y luego a Aly. Estaba destrozado por dentro, pero no quería que lo notaran. Tenía que ser fuerte. Por ellas. Por él. Por mi.

El funeral fue el 26, así que Navidad fue un horrible día de velatorios y demás. Mi madre preparó la recepción en casa. El funeral fue... triste, como todos. La misa, el cementerio, la gente después hablando...

Me siento impotente. Ha muerto, y yo no he podido hacer nada... ni siquiera he sido capaz de llorar...

En fin, Jubes. Estoy hecho polvo. Siento haberte soltado todo esto así, pero tenía que sacármelo de encima.

Gracias por estar ahí.

Besos.

-- Joss"

Próximo número: Marvel Kid #6. Un San Valentín de muerte... ¡con la banda del bate!

KIDMAIL!

Holas!

Antes de que nadie lo diga... ¡Han matado a Peter! ¡Hijos de putaaaaa!

Bueno, la verdad es que este número está basado en algo que me pasó en realidad. Uno de mis mejores amigos, Luis, murió hace ya unos cuantos años de una enfermedad de esas raras. Los médicos aún no saben cúal. En fin, estés donde estés, Luis, aún te echamos de menos.

Pasemos a las cartas...

Xumer (ese monstruo guionista de Cachorros, Patrulla-X y chorrocientas series más), se acaba de dar cuenta de la existencia de un personaje llamado Peter en esta serie... veo que la has estudiado atentamente, porque lleva desde el principio, jejeje.

También se queja del poco sexo del número anterior... bien, bueno, el caso es que había, ¿no?

Y no, no hay crossover entre Cachorros y Marvel Kid... es que tus personajes son muy malos y podrían corromper al mío, jejeje.

Gracias por tus comentarios, Xum, te debo una cerveza...

También nos ha escrito Fordcopp, la mente maestra tras el Halcón, que se pregunta por la periodicidad de esta serie... pues bien, como habrás visto, mi periodicidad es... diferente... sale cuando me viene la inspiración (sí, ¿qué pasa? Tengo que estar inspirado para escribir esto, como Busiek su Astro City, jejeje).

Y por último nos escribe Ben Reilly, el clon de Spider-Man, que también se queja del poco sexo y de la periodicidad... bien, aquí no tengo "negro" que me escriba los números, así que os tendréis que aguantar y esperar a mi inspiración... que la musa no viene todos los días... ni todos los meses...

Bueno, eso es todo por este mes. Espero que la inspiración vuelva pronto.

MarvelTópicos saludos...

-- Carlos