MASACRE VOL. 3 #8
EL TOUR EUROPEO DE MASACRE (DEADPOOL EUROPEAN TOUR, PARA LOS TIQUIS MIQUIS) I
Guión:
Alex García
Portada: Siryn canta al micrófono; Comadreja toca la batería y Masacre
machaca la guitarra. Los tres están iluminados por diversos focos y fans
enloquecidas aplauden y gritan.
"¿Qué vamos a dónde?"
A partir de un proyecto concebido con Xumer.
Akademgorodok, Rusia.
Construida en la era soviética, esta ciudad reúne a los principales
científicos rusos. Uno de ellos, Anatoli Vaschenko, ha decidido emigrar
rumbo a pastos más verdes. Sube rápidamente al tren, mirando constantemente
a cada lado, buscando enemigos en las sombras. Se sienta en el rincón más
alejado que puede y se abraza fuertemente a su maletín de cuero negro. Ese
maletín puede hacerle rico... sólo espera que no se den cuenta de su
desaparición hasta que esté muy lejos.
Intranquilo, apoya la cabeza en la pared y cierra los ojos, intentando
conciliar el sueño.
En un lujoso piso franco en California.
-Bueno, pelirroja, empaqueta el bikini que nos vamos - dice Wade Wilson, Masacre, tras colgar el teléfono.
-¿A dónde se supone que vamos? - pregunta Teresa Rourke, Siryn.
-Bueno, acaba de llamar Correo y me ha pasado un encarguito por Europa.
Buena paga, buenas vistas y sana comida europea: pizzas, espaguetis,
hamburguesas... nada de la comida basura que tenemos aquí.
-Bueno, ¿Y en qué consiste ese trabajo?
-Pues nada, recuperar un maletín que un ruski ha mangado de su país. La
maleta está llena de papeles, creo que son planos de una fuente de energía
mejor que las pilas alcalinas, o algo así... bueno, que a mí me pagan por
mangarla y dársela a Correo, él se encargará luego de dársela al pez gordo.
-Eres un mercenario sin escrúpulos, Wade Wilson.
-Mujer, escrúpulos sí que tengo; tengo escrúpulos a la hora de comer comida
japonesa, para ver culebrones o incluso tengo escrúpulos para ponerme ropa
interior femenina... Aunque si te empeñas, tampoco voy a hacerle asco a tus
braguitas, nena.
-¡Pero serás...! - Terry le lanza un jarrón a Wade que éste esquiva por los
pelos; se incorpora y mira su reloj.
-¡Ah, claro! Estamos a principios de mes; eso explica tu humor. Cosas de
mujeres, ¿Eh, irlandesa? Bueno, me voy a llamar a Comadreja para que puedas
posar esa televisión y reprimir tus impulsos de lanzármela.
Terry no puede evitar sonreír; es bueno ver a Wade animado otra vez tras
todo lo que ambos han pasado. Pero no puede evitar preguntarse si en
realidad es todo una fachada, y Wade está destrozado por dentro. Apenas han
hablado de tema en los dos meses pasados1... pero Terry confía en que,
llegado el momento, Wade hablará con ella. Después de todo son amigos, ¿No?
Con un suspiro de resignación deja la televisión en su sitio y se dirige a
su dormitorio para hacer las maletas.
Reunidos en una pequeña sala, el supergrupo conocido como el Protectorado
del Pueblo contemplan imágenes de un hombre bajo y medio calvo en una
pantalla de televisión.
-<Este hombre -dice el Guardián Rojo-, es Anatoli Vaschenko, científico. Al
parecer Vaschenko está trabajando en un proyecto de alta seguridad. O tal
vez debería decir trabajaba, pues al parecer ha robado información referente
al proyecto y ha huido. No podemos permitir que escape con ella. Podría
vendérsela a los americanos... o a alguien peor.>
-<Entonces -interviene Vostok, el androide-, la opción lógica es interceptar
a Vaschenko y recuperar la información.>
-<Bah, este no es trabajo para un dios -replica Perun-. ¡Deberíamos librar
grandes batallas, no ser recaderos! ¿A esto se ha reducido la gloria de los
héroes rusos?>
Ignorando los fútiles comentarios de Perun, Ataque Aéreo, antes conocido
como la Dinamo Carmesí, toma la palabra.
-<¿Dónde se ha visto a Vaschenko por última vez?>
-<Los servicios de inteligencia le vieron en un tren en Molensk, hace una
hora, aproximadamente.>
-<Entonces -interviene Fantasma, que se había mantenido al margen de la
conversación, memorizando el rostro de Vaschenko-, ya debe haber entrado en
suelo bielorruso.>
-<Así es -asiente Guardián Rojo-, no obstante contamos con un breve
permiso... una cortesía por los viejos tiempos. Si actuamos con rapidez
podemos interceptar el tren antes de que llegue a Minsk y detener a
Vaschenko sin armar demasiado jaleo. ¿Estás con nosotros, Luz Estelar?>
-pregunta al notar distraída a la heroína.
-<Eh... sí, Guardián, disculpa. Estoy lista para entrar en acción.>
Guardián Rojo mira fijamente a su compañera, y anterior portadora del traje
que él lleva; había sido poseída por la Presencia y dotada del mismo con
grandes poderes, y tras la muerte de él ella entró en coma, despertando del
mismo hace poco y uniéndose al Protectorado. Guardián no está seguro de
poder confiar del todo en ella, tal vez en parte por el temor a que algo de
la Presencia siga en ella, un temor fundado por el hecho de que aún retiene
los poderes que le confirió la Presencia. Pero eso es algo para más
adelante, decide Guardián...
-<Bien, Protectorado del Pueblo, en marcha.>
-Bueno, ¿Y ahora qué? -pregunta Comadreja, a los controles del pequeño avión
en el que él, Masacre y Siryn se dirigen a Rusia.
-Según mis contactos, el tipo que tiene el maletín debería llegar a Minsk en
media hora -responde Masacre.
-¿Tiro para Bielorrusia, pues?.
-Motores a toda, señor Comadreja.
-Tienes muy buenos contactos, Wade -comenta Siryn.
-Bueh, digamos que desde que la Rusia soviética se fue al garete, lo que
queda de la KGB no es muy competente con la seguridad... los tengo más
pinchados que a un muñeco vudú.
-Parece increíble que una organización de espionaje esté tan mal...
organizada.
-¡Je! Nena, cuando esto acabe, recuérdame que te hable del CESID...
Anatoli contiene el aliento cuando ve, por la ventanilla, al Protectorado
del Pueblo que se dirige hacia el tren, y maldice entre dientes. No deberían
estar aquí, ya no estamos en suelo ruso, piensa. Maldición...
Ataque Aéreo se posa en la locomotora y ordena a los conductores que se
detengan; tal vez ya no sean leales a la bandera rusa, pero sin duda no van
a discutir con un tipo embutido en una armadura armada hasta los dientes. El
tren se detiene.
-<Bien, Protectorado, rastread los vagones. Tiene que estar aquí>. - ordena
Guardián Rojo.
-<Me niego>.
-<¿Qué dices, Perun?> -pregunta Guardián, visiblemente irritado.
-<Esa no es la tarea de un dios, camarada. Husmea los inodoros de este
patético transporte si quieres, pero no podrás forzarme a que yo haga lo
mismo>.
Guardián mira fijamente a su compañero, y el resto del Protectorado observa
la escena con aprensión; el carácter altivo y rebelde de Perun ha irritado a
Guardián durante largo tiempo, pero esta podría ser la gota que colme el
vaso. Finalmente, decidiendo juiciosamente que ese no es el mejor momento
para discutir, Guardián se vuelve y ordena al resto del grupo que siga
buscando.
A los diez minutos no hay rastro de Vaschenko. Ataque Aéreo, Fantasma y Luz
Estelar son enviados a hacer un reconocimiento de la zona, pero sin
resultado.
-<Puede que Vaschenko no subiese a este tren> -dice Fantasma.
-<Es posible, pero lo dudo. Tal vez tenga algún contacto que le avisase de
nuestra llegada, o puede que incluso se bajase en alguna parada. Sea como
sea, estoy seguro de que se dirigirá a Minsk>.
-<Entonces, debemos ir a Minsk> -anuncia Vostok.
-<Exacto. ¿Vienes, Perun, o también eso te parece impropio de un dios?>.
-<Contén tu lengua, Guardián, no es sensato incurrir en las iras de un dios>
-replica Perun.
Mientras el supergrupo soviético se aleja, Anatoli no puede creerse la
suerte que ha tenido. Oculto bajo el tren, se aprieta contra los hierros con
fuerza, a pesar de que en su posición no le hace falta, apoyado entre
varios. Toca con una mano el maletín y se tranquiliza; hasta ahora todo va
bien.
Estación central de trenes de Minsk.
-Podrías disimular un poco, Wade -dice Siryn mientras mira críticamente a su
compañero, vestido como siempre salvo por un grueso abrigo para protegerle
del frío.
-Sí, podría quitarme la máscara, eso mejoraría mis posibilidades de pasar
desapercibido.
-La única forma en que Wade podría pasar desapercibido es amordazándole
-comenta Comadreja a través de la radio.
-Tú sigue así, Comi, y te pasarás las navidades comiendo puré de turrón.
De repente Siryn le da un codazo a Masacre.
-Ey, Terry, estoy en mi derecho constitucional de amenazar a Comadreja
-dice, pero se interrumpe al ver al Protectorado del Pueblo-. Vaya, vaya,
los Capullos Anteriormente Conocidos Como Supersoldados Soviéticos.
-¿Crees que están aquí por lo mismo que nosotros? -pregunta Terry.
-O eso, o están regalando muñequitos del Abuelo Escarcha -responde Masacre-
Comi, ve pasándome un informe de cada uno de ellos por el auricular, me hará
falta.
-Wade, tío, ¿No estarás pensando en enfrentarte a ellos tú solo?
-Claro que no, colega. Tengo a Terry conmigo.
Theresa Rourke traga saliva. ¿Ellos dos contra el Protectorado del Pueblo?
La vida era más fácil cuando sólo tenía que enfrentarse a psicópatas
asesinos racistas dedicados a exterminar a los mutantes de la faz de la
Tierra....
El tren llega. Todos se ponen tensos. El Protectorado revisa el tren con los
mismos resultados que antes. Nada. Entonces Masacre empieza a partirse de
risa.
-Dios mío, ¡Si son más tontos no nacen! ¿Cómo no se iba a ir la Unión
Soviética a tomar por culo con gente tan competente?.
-¿De qué hablas, Wade? -pregunta Siryn, intranquila por estar llamando la
atención de manera excesiva. Por toda respuesta Wade señala a la parte baja
del tren, donde a duras penas puede ver a Anatoli Vaschenko fuertemente
agarrado a los bajos del tren - Oh, ya veo.
-El tren todavía tardará unos minutos en salir, e imagino que Vaschenko
querrá entrar en el tren de una vez, ahí abajo debe hacer frío.... Sacaremos
billete y le acompañaremos en su viaje.
El plan de Wade no está mal, pero en ese momento Guardián Rojo, Luz Estelar
y Fantasma vuelven, en el mismo momento que Vaschenko sale de debajo del
tren.
-<Esto ya es el colmo -dice Guardián Rojo a voces-; ahora ¿Dónde se ha
metido Perun? Y no me digáis que se ha ido a la cantina. Debería...> -Se
interrumpe al ver a Vaschenko, quien se queda helado; por un segundo el
Protectorado se queda de piedra. Wade se da un golpe en la frente con su
mano y Siryn murmura:
-Estamos muertos...
-Comadreja -dice Masacre-, vamos a liarnos a hostias con el Protectorado del
Pueblo. Prepárate para darnos fuego de cobertura.
-¿A hostias con esos? ¿Tú estás loco?
-Después de tanto tiempo se entera ahora -suspira Siryn.
-Ah, vamos, pelirroja, voy a empezar a pensar que no tienes fe en mi -la
mirada que le dirige Siryn es muy elocuente-. Vaaale, YA pienso que no
tienes fe en mí. Tú tranqui y déjate llevar... yo le digo eso a mis citas y
funciona -sin una palabra más Masacre corre hacia el Protectorado, quienes
empiezan a avanzar hacia su objetivo.
-Ey, muchachos, no estéis tristes, ha llegado Papá Masacre cargado de
regalos -suelta varias granadas de humo que dificultan la visión de sus
enemigos-, pero por ser malos, os iba a traer carbón. Claro, que como
vivimos en tiempos modernos, chupad gas lacrimógeno - y suelta un par de
botes de dicho gas, que no le afecta puesto que su máscara lleva
incorporados varios filtros especiales que le protegen.
Siryn no entra aún en la refriega, no ve nada y no tiene ganas de respirar
gas lacrimógeno y espera pacientemente desde el aire. Sin embargo, un
tremendo vozarrón le hace volverse:
-<¿Qué pasa aquí? ¿Quién eres tú, muchacha, y por qué atacas a mis
compañeros?> -dice Perun, con un acento ligeramente pastoso. Siryn no
entiende nada de ruso, pero el significado está claro, máxime cuando Perun
esgrime su maza y hoz sin esperar respuesta y se abalanza sobre ella. Siryn
vuela un poco más alto, se lanza sobre la espalda del dios y le agarra por
una pierna, desequilibrándolo y haciendo que se golpee contra una pared.
Perun se incorpora sin aparente esfuerzo y ríe a carcajadas.
-<¡Ah, por fin algo de acción!>
Entre toses, Guardián Rojo reacciona rápidamente e intenta detener a
Masacre.
-Ah, ah, Capitán Siberia -dice Wade mientras se agacha y golpea en la
entrepierna del otro con su rodilla-, ¿No te ha dicho el médico que fumar es
malo? Claro, es que los rusos estáis todo el día privando vodka, y además de
ciegos os quedáis sordos -un dedo le toca el hombro; ¿Quién puede ser?
Fantasma y Luz Estelar siguen luchando por respirar, -Dios mío, qué le ha
pasado a la cara de Fantasma, parece pariente de Wade- así que ellas no...
oh, oh. Wade se vuelve para encontrarse con Ataque Aéreo y Vostok.
-<Parece que hicimos bien en volver> -afirma Ataque.
-Y me temo que al ser un androide no me veo afectado por el gas lacrimógeno
-dice Vostok, en inglés, ya que su enemigo también habla dicho idioma.
-Ni yo dentro de mi armadura. Y creo que la frase para este momento debería
ser -el puño de Ataque golpea a Masacre, lanzándole varios metros por el
aire- "Chúpate esa".
-Jo, jo, qué graciosa la lata de conservas. Tú espera a que encuentre un
abrelatas -murmura Masacre. En ese momento ve que Perun va a aterrizar sobre
él y se aparta por un pelo, mientras Ataque Aéreo y Vostok sacan a sus
compañeros del área del gas.
-Tienes mucho valor enfrentándote a nosotros, americano -dice Guardián,
todavía con los ojos llorosos-. Pero eso no va a cambiar el hecho de que nos
llevaremos a Vaschenko.
-Y un carajo -dice Comadreja. Un potente rayo procedente de su furgoneta
alcanza a Perun y le hace trastabillar-. Nadie le quita su parte de los
beneficios a Comadreja y se va tan tranquilo.
Perun recupera el equilibrio, aparentemente impertérrito.
-Hace cosquillas -ríe.
Vostok se concentra, y las armas de la furgoneta apuntan a Comadreja. En
respuesta, Siryn empieza a gritar, dañando parte de los circuitos de Vostok;
Guardián Rojo, emulando a su contrapartida, el Capitán América, arroja su
escudo contra la irlandesa pero Masacre lo desvía con una patada. Fantasma,
harta de todo usa su poder, y de repente Siryn, Masacre y Comadreja dejan de
ver y de oír.
-Bueno, ya está -comenta Luz Estelar.
-De eso nada -señala Ataque Aéreo-, Vaschenko ha huido con la confusión.
-No puede haber ido muy lejos -dice Guardián-, pero estos tres podrían
molestarnos.
-¿Qué hacemos con ellos entonces? -pregunta Fantasma- No puedo retenerlos
eternamente.
Como respuesta a la pregunta de Fantasma una súbita oscuridad se apodera de
la zona; alguien increíblemente fuerte manda por los aires a Ataque Aéreo y
varias descargas de energía aturden al resto del Protectorado. Rota la
concentración de Fantasma Siryn, Masacre y Comadreja recuperan el uso de sus
sentidos al mismo tiempo que la oscuridad se desvanece, revelando a Forja,
Fortachón, Random, Shard, el Hombre Múltiple y Noche: Factor X.
-Hemos venido a buscar a Anatoli Vaschenko -anuncia Forja-. No os
entrometáis y todos nos evitaremos problemas.
-Y ya que estamos aquí decidimos echarle una mano a una vieja amiga -añade
Jamie Madrox, refiriéndose a Siryn.
-Si lo que buscáis es pelea, americano, desde luego la tendréis -replica
Guardián Rojo, desafiante. El resto del Protectorado se agrupa junto a él.
-Sí, eso -dice Guido-; nada como un poco de jarana par conservar la línea.
-Oh, genial -murmura Masacre-. Un montón de super primos dándose de hostias
por un ruski con más entradas que el estadio de los Lakers. Comi, descorcha
la petaca del quitapenas....
Próximo número: Pues sí, para qué lo vamos a negar... tortas y más tortas
cuando el Protectorado del Pueblo y Factor X se enfrentan... con Masacre &
cia en medio.
1.- Ver los números anteriores para saber lo que le ha pasado a Wade últimamente.
LA CHOZA DE WADE
Bueno, año nuevo, saga nueva :P Para comentarios, insultos, anuncios por
palabras, etc. Escribid a alexmola@hotmail.com.
Nota del Editor: Este número tiene lugar tras Defensores #156