PORTADA: Doctor Muerte en la parte central, con los Power en posición de ataque...
RESUMEN: Los Power, en su intento de liberar a la gente, quedaron atrapados
en un cubo de materia oscura. Se salvaron, pero uno de ellos pagó el
precio...
Hace 5 minutos había un enorme colegio... ahora no hay nada. En el centro de
la nada, Katie Power observa con miedo y asombro. Debajo de su mirada se
dibuja una sonrisa malévola en su cara.
- Un dólar por lo que piensas, Katie.
- Hola, Jack, pensaba en que siempre he tenido poder, pero jamás pense...
- ¿Que pudieras hundir el colegio? Kat, ten en cuenta que eres muy joven y
que nuestros poderes evolucionan con nosotros.
- Pero, ¿cuál es el limite, Jack?
- No sé, teniendo en cuenta que transmutas energía. Yo creo que depende de
la energía que seas capaz de absorber y almacenar.
- ¿Están todos bien, Jack?
- Creo que si, Katie, y por lo que veo nos has regalado unas bonitas
vacaciones...
- Jejejjejes... sí, si jejejj.
La oscuridad es ya familiar, ha estado aquí antes, de nuevo esa voz conocida
y otra vez esa llamada.
- Alex, ven a por mi, sálvame, guíame a la luz,salvame...
- ¿Quién eres? ¿Dónde estas? ¿Qué puedo hacer para salvarte?
- Guíame a la luz...
- ¡¡¡¡ALEX, ALEX!!!!
- ¿Qué? - ...de nuevo la luz invade la oscuridad...
- Soy yo, Allison, despierta, despierta.
Alex Power abre los ojos. Lo primero que ve es a su novia, Allison Bames.
Más allá, médicos, ATS, policías. Al fondo un colegio derruido y su madre a
su lado.
- Tranquilo, cariño, no te muevas. Has recibido un golpe y tienes una
conmoción. ¿Sabes qué ha sido de los terroristas?
- No sé, mamá, no me acuerdo.
- La policía anda despistada, no tienen indicios, parecen haberse evaporado,
además...
- ¿Además qué?
- Allison, creo que...
- ¿Habéis visto a Vlad?-, interrumpió el Sr. Westendorf.
- La verdad, creo haberlo visto en lo que queda del gimnasio con Julie, Sr.
Westendorf.
- Gracias, Allison.
Mas allá, a lo lejos, dos figuras miran los restos del colegio.
- Ha sido divertido, Julie, ¿no?
- Nunca es divertido, Vlad. Quizás al principio. Después todo es igual.
Somos niños y ya hemos visto más de lo que cualquier adulto ha visto...
empiezo a estar cansada. Más que una afición, es un deber que creo empiezo a
no estar preparada para cumplir.
- Yo creo que sí, Julie, creo que sí. Y antes de pensar en lo oscuro y ver
el vaso medio vacío, deberías ver lo bueno que habéis hecho. Mira el vaso
medio lleno.
- ¡¡¡Vlad!!!
- ¿Papá? ¿Cómo estas?
- Eso debería preguntarlo yo, Vlad.
- Yo estoy bien, aunque quiero volver a casa.
- Pues vámonos, Vlad.
- ¿Te vienes, Julie?
- Sí, aquí ya no queda nada que hacer...
El director O'keef mira a su alrededor. Se siente triste. Hacía 10 años que
pisaba el instituto y ahora está destrozado. Cómo se lo explicará a la
Consejera de Educación, si ni la policía ha encontrado pruebas de los
terroristas, y, lo peor, ¿dónde están los niños desaparecidos?
- ¿Sr. O'keef?
- Si, ¿quién es usted?
- Me presento. Soy Cameron Walker, y tengo una propuesta que le interesará
tanto como a la Consejera de Educación...
- ¡¡¡Allison!!!
- Tía Preysler, ¿qué haces aquí? ¿Dónde esta Dougie?
- No lo encuentro, ¿no está contigo? La policía piensa que se lo han llevado
como a los otros 5 niños, pero mi Dougie... mi Dougie no. ¿Qué pueden querer
de él?... Buuuuuaaaaaaaa.
Hola, soy Snow Irons aquí, en directo para Sabor a Hiel desde los restos del
colegio George Washington, donde han desaparecido 6 niños, supuestamente
secuestrados por un grupo terrorista. Y aquí tenemos a una desconsolada
madre que nos ha ido acompañando en la retransmisión de este evento, a la
cual acaban de comunicarle la desaparición de su hijo. Cuéntanos a la
audiencia, Isabelle ¿qué sientes?...
- Ehhh... ¿qué dices?
Nos vamos alejando del colegio. A años luz nos encontramos en un lugar
conocido, con el retorno de viejos amigos. Kymelia. Lugar: la impresionante
Inak'edai.
- Adelante, Byrel.
- Gracias, Rassai, hace mucho que espera la henaï.
- Tranquilo, Byrel, llegas a tiempo, pasa.
La inak'edai es la sala del cristal estrellado donde la henaï se reúne para
las decisiones que llevan y dirigen la vida de los Kymelianos. Byrel entra
en la sala y vuelve a experimentar la misma sensación de maravilla que
tantas veces ha sentido, viejos recuerdos acuden a su mente, cuando era el
a-henaï. La sala es circular, el suelo es de alabastro, el techo que la
recubre es una semiesfera de cristal brand, una de las maravillas que los
kimelianos han creado. Se acerca hacia el centro donde los henaï están
reunidos. Le ven acercarse, lo saludan y cada uno ocupa su lugar en la mesa
circular, también de cristal brand. En un lado del circulo, el a-henaï
Cental; enfrente Byrel; a los lados, los b-henaï, cada uno especialista y
consejero de cada una de las materias de los kymelianos.
- ¿Qué deseáis, Cental?
- Te hemos hecho venir, Byrel, porque hay irregularidades en tu
descendencia.
- ¿Irregularidades? Mi hijo murió, como bien recordareis.
- Así es, pero a efectos de descendencia, los terrestres son considerados
nietos tuyos, al serles entregado el legado de tu hijo.
- Por lo tanto, son también Kymelianos, ¿y?
- Como bien sabes, Byrel, el clan CrinBlanca ha sido una familia de peso en
el consejo de los henaï, y todas aquellas familias que desean que sus hijos
entren en el consejo deben pasar la Kendaya como paso previo a estudiar la
carrera para llegar a la henaï, y si tu clan no quiere perder durante una
generación el derecho a entrar en la henaï, el mayor de tus nietos, Alex
Power-CrinBlanca debe ser traído aquí, y permanecer aquí mientras dure su
aprendizaje.
- ¿Es esa vuestra decisión, Cental?
- Si, Byrel. Debes partir hacia la Tierra inmediatamente, ya que, por alguna
razón que desconocemos, Viernes no responde a nuestras llamadas.
- Pero, Cental, Alex Power tiene otras responsabilidades, su familia, sus
estudios terrestres...
- También se debe a Kymelia. No en vano le fue entregado un gran don que le
hace uno de nosotros. Por lo tanto, también debe cumplir aquí. Es mi
decisión, Byrel, si no las aceptas, atente a las consecuencias.
- ¿Consecuencias?
- Podríamos traer por la fuerza a los Power y arrebatarles su herencia
kymeliana y con ello terminar con el clan CrinBlanca.
- Muy bien, Cental ColaNegra. Tus deseos se verán cumplidos.
- Así lo espero, Byrel, así lo espero.
Mas tarde, en la pista de lanzamiento de Mokda, la capital Kymeliana, una
intelinave Kymeliana sale con destino la Tierra... Byrel maneja la nave con
cuidado. Kymelia es un gran enclave en todas las rutas comerciales, punto de
entrada y salida de agujeros de gusano, es el mayor puerto del universo, un
enclave muy interesante para mucha gente...
Nos vamos de Kymelia, aunque no abandonamos las lejanas galaxias. Nos
acercamos a otro planeta menos luminoso, menos bonito, pero mucho más
peligroso, no solo por su cercanía al agujero negro, llamado desde tiempo
inmemorial el agujero de los olvidados. En el interior del planeta, dos
personajes mantienen una pequeña conversación...
- ¿Tienes los datos, Utuk?
- Así es, hermano, nuestras sospechas son ciertas. Algo ha salido del
agujero.
- Pero eso significa...
- Eso significa que vuelven, y si no queremos volver a nuestros orígenes
debemos irnos de aquí hacia una plaza mejor, más fuerte que esta. Avisa al
Gran Hermano Llum.
Volvamos a la Tierra, una empresa llamada Soluciones Genéticas S.L., filial
de Próximo Paso.
- ¿Dr. Gentry?
- Ah, Srta. Walker. ¿Cómo está?
- Bien, Gentry. ¿Satisfecho con la nueva cosecha?
- Sí, Srta. Walker, son niños de gran potencial, pero aun así confieso que
hubiese sido un gran desafío contar aquí con los Power...
- No se preocupe, pronto tendremos lo que deseamos. Yo, el conversor de
antimateria, y usted, los Power, aunque sus vidas ya se las he prometido a
otra persona.
- Me vale con los cuerpos, Srta.Walker.
Restos del colegio George Washington, barrio de Tribeca, New York.
- ¿Cómo esta tu tía, Allison?
- Bien, Sra. Power. Mi tío se la acaba de llevar a casa después de que los
médicos la sedaran un poco.
- Lo siento por ella, no sé lo que haría si me arrebataran a mis hijos.
- Mire, por ahí viene Alex con los demás.
- ¡Mama!
- Eh, Katie, cariño, que sucia estás, cuando lleguemos a casa te voy a meter
en la bañera. Por cierto, he estado hablando con el Sr. O´keef y no tenéis
clase hasta el próximo lunes, ya llamarán diciendo dónde os han reasignado
hasta que el colegio este restaurado. Venga, niños, vámonos, y Katie, no me
mires con esa cara y no te quedes atrás.
- Eh, Jack, no empujes.
La comitiva formada por los Power, Allison y los Westendorf caminan hacia
sus hogares, mientras un coche avanza hacia su encuentro...
- ¿Te ocurre algo, Vlad?
- ¿Por qué lo dices, Julie?
- Te veo nervioso, mirando a tu alrededor.
- Es que hay algo que no me cuadra.
- ¿El qué?
- No sé, es una sensación extraña que a veces tengo... y ahora la tengo.
- A ver si ahora vas a tener poderes, jjejejeje.
- ¿De qué habláis, chicos?
- Cosas nuestras, vete a dar por saco a Jack.
- No puedo, esta pidiéndole dinero a mamá para comprar tebeos.
- Que morro tiene.
- Nos estamos retrasando, Allison.
- Es que así disfruto más el momento, hace tanto que no estamos juntos.
Estoy preocupada por Dougie. ¿Qué le puede haber pasado?
- No lo sé, Allison, son demasiados interrogantes. ¿Quiénes eran esos
hombres? ¿Por qué nos querían? ¿Por qué se llevaron a esos niños? Lo que he
aprendido desde que hago de héroe es que al final todo sale y acaba saliendo
a la luz.
- Espero. ¡¡¡Eh, me estas cogiendo la mano!!!
- ¿Te importa?
- No.
- ¡Que no, Jack! .No te pienso adelantar la paga de la semana y mucho menos
para comprarte el numero 10 de Planetary por muy bueno que sea...
- Pero mamá...
- Lo que tenias que hacer es ahorrar y estudiar, olvidándote de esas
tonterías. ¡Pietro! ¿Qué te ocurre?
Pietro Westendorf se vuelve pálido. Se queda parado ante el vehículo que ha
frenado frente a ellos, el cual luce una gran insignia con el escudo de
Latveria.
- ¿Qué ocurre, Pietro? No me asustes.
- Vete, Margaret.
- No me voy.
- ¿Qué ocurre, papá?
- ¡IROS!
- Yo que usted reconsideraría esas palabras.
La voz sale del interior de la portezuela abierta del coche. De ella emerge
una figura verde y brillante, la cual nunca Margaret Power pensó que tendría
frente a frente.
- ¿Víctor Von Muerte?
- Si, Sra. Power.
- ¿Me conoce?
- Sí, pero usted no es quien me interesa en estos momentos. ¿Westendorf?
- Sí.
- Creo que conoces los delitos que se te imputan. Es hora de que vuelvas a
Latveria y pagues por ellos. No intentes huir, esta vez no lo conseguirías,
así que coge al chico que volvemos a Latveria.
- Quiero dejar a mi hijo aquí. El no ha hecho nada.
- La palabra de Muerte es ley, y no me gusta repetir las cosas.
- Vlad, hijo, al coche.
Los Power se quedan sin palabra. No pueden creer lo que ocurre. Los
Westendorf entran en el coche. Alex mira a Vlad. Ve el miedo y la
desesperación en sus ojos, una suplica de ayuda y no puede evitar decir...
- ¡Muerte!
- ¿Sí, Alex Power? - Las miradas se cruzan.
- Suéltalos.
- Je, ¿quién te crees que eres, niño? Si tanto los quieres, ¡rescátalos!
Y con esto Muerte entra en el coche y desaparece. Alex Power masculla...
- Lo haremos, Muerte, lo haremos.
EN LA GUARDERIA
Bienvenidos al 67 de Power Pack. Como veis, las fichas comienzan a
ordenarse, no os impacientéis que todo tendrá explicación.
Atentos a los próximos episodios. Habrá romance, un miembro nuevo, un
retorno inesperado... todo ello aderezado con el buen hacer de nuestro
querido Muerte.
¿Cómo irán los Power a Latveria? ¿Cómo explicaran la ausencia a papá y mama?
¿Tendrán algún futuro Allison y Alex? ¿Cuáles son las acusaciones de Muerte?
¿Y Byrel? Y lo más importante... ¿El peluquero de Cameron Walker sigue
vivo? Todo esto y más en próximos episodios......
Para quejaros, felicitarme o lo que se os ocurra escribid a:
Hawkeye@mixmail.com