Una sombra se desliza por un callejon, como no, es de noche. Fijemonos en este tipo, es un hombre flacucho y debil, su mano sostiene temblorosamente una pistola.

Se acerca a una de las esquinas de la callejuela. Llama a una puerta con los nudillos. Se pone nervioso y la empieza a golpear fuertemente.

- Ricky... Dejame entrar cojones...- Grita. La puerta se abre, un chaval de unos 22 años le abre, llevaba gafas y un extraño gorrillo de Santa Claus, de las Navidades pasadas, supongo.

- ¿Que te pasa?- Le dice el chaval.- Pareces nervioso, he comprobado con las camaras que no te sigue nadie.-

El hombre tembloroso parece calmarse y se seca el sudor de la frente. Aun así no deja de temblar.

- No se lo que me pasa, tengo la extraña impresión de que alguien nos observa...- Dice.

- Tranquilo, ya te digo que lo he comprobado con las camaras, es imposible que nadie nos halla seguido.- Le responde. Para mís adentros me rio, tiene gracia, por muy extraño que parezca el tipo de los nervios es quien tiene razon. Yo les observo, aunque ellos no se den cuenta. Las camaras no me han detectado debido a un pequeño truco que empleo a menudo, después os lo explico.

Ambos hombres entran en el pabellon.

- ¿Que os pasa? ¿Por que habeis tardado tanto en entrar?- Pregunta una ronca voz desde dentro.

- Nada, Rock, Mich se ha puesto nervioso.- Dice Ricky.

- Estoy seguro de que antes me seguía alguien...- Comenta Mitch, el nervioso del grupo.

- ¿Lo habeis comprobado en las camaras?- Pregunta Rock, es un tipo bastante desagradable, muy gordo y bastante sucio, sin embargo actua como el lider, decido que él sera al primero al que tumbaré. Después noquearé al joven Santa Claus y por ultimo al nerviosillo. Mejor será que me materialice en una esquina oscura.

¿Que como estoy aquí sin que me vean? Facil, soy un vampiro, contra la creencia generalizada existo, también tengo algunos trucos... Convertirme en niebla és uno de ellos, así entre por la puerta sin que se diesen cuenta. Tambien soy detective, por eso estaba siguiendo al nervioso, él y su grupo han robado una importante información y me han encomendado recuperarla. Pero dejemonos de chachara, estoy trabajando, si quereis después de noquear a estos payasos os cuento cuan desgraciada es mi vida desde que soy vampiro, como suelen hacer estos en las peliculas.

Algo altera mis planes.

Una persona llama a la puerta justo cuando me materializo en una esquina, ellos no me ven, me oculto a la perfección entre las sombras.

- Debe ser Lokter.- Dice Rock.- Dijo que vendría a esta hora con el dinero.-

Ese Lokter debe ser el que los contrató. Decido retrasar mi ataque.

Le abren, nada más entrar hay algo que no me gusta en este tipo. Es un hombre bastante corpulento, con la espalda del tamaño de un armario, al contrario que sus sicarios, él va impecablemente vestido, con una gabardina que lo cubre casi por completo y un pequeño bombin.

- Buenas noches. Supongo que deben tener el material que les encargué.- Dice con una voz suave como la miel.

- Si. Aquí esta. ¿Tiene usted el dinero?- Pregunta Rock.

- Claro.- Lokter abre un maletin y les enseña su interior, Mitch sonrie de oreja a oreja.- Ahora por favor, maten al hombre entre las tinieblas a sus espaldas.-

Los tres rufianes se ven casi tan sorprendidos como yó, y para mi desgracia tardo más en reaccionar que ellos. Mitch y Ricky empiezan a dispararme casi al instante y Rock se gira para coger una recortada de la mesa. Tenían la iniciativa, por lo que sería mucho más dificil de lo que pensaba antes. Saltó a cubierto detrás de unas cajas.

- Dejadme, chicos. Yo lo haré salir.- Le oigo decir a Rock. Sin darle tiempo a actuar salto velozmente sobre donde calculo que está. Y acierto. Una de las ventajas de ser vampiro es un oido fuera de lo normal. Me doy cuenta de otra de las ventajas cuando Ricky me revienta una pierna con un disparo. Sin dudarlo le rompó el cuello a Rock y saltó sobre Ricky. Le cojo por el cuello y le hago girar, utilizandole de escudo contra Mitch, que torpemente vacia su cargador en las tripas de su amigo. Dejo caer el cuerpo sin vida de Ricky.

- Podemos hacer esto por las buenas o por las malas.- Le digo al tembloroso Mitch, si hay una cosa que no aguanto és ver a un hombre llorar de miedo y Mitch lo está haciendo.- ¿Como prefieres que lo hagamos?-

Miro a mi alrededor... Como suponía el señor Lokter se ha ido, con ambos maletines, el del dinero y el de la información.

- No me haga daño... Le diré lo que quiera.- Me dice Mitch. Noto un olor asqueroso en el ambiente, Mitch se ha cagado encima.

- Oh, si, estoy seguro de que lo haras.- Digo. Solo para acojonarlo más le cojo del cuello y le levanto a un palmo del suelo.- ¿Quien és el señor Lokter?-

- No lo sé.- Dice mientras intenta recuperar el aliento.

- Lo que me hace replantearme mi decision de dejarle vivir, Mitch.- Empleo su nombre de pila para que se sienta más en familia.

- No me maté. Lo que si que sé es lo que había en el maletín que se ha llevado.-

- Cuentamelo, Mitch, no te hagas de rogar.- Le levantó un poco más alto y le aprieto más fuerte.

- AAGGGgghhh. O uedo abla.-

- Te bajaré si prometes no intentar nada.- Digo mientras le poso de nuevo en la tierra.

- En el maletín que se han llevado habían unos planos, para contruir una bomba...-

- ¿Una bomba?-

- Si, una bomba, pero no de cualquier tipo... Una bomba Gamma.-

Eso sí que no me lo esperaba. El caso se estaba poniendo interesante por momentos.