MarvelTopia
Marvel
 
 
 

What If?

What If? vol. 3 #6
¿Y si los 4 Fantásticos fuesen supervillanos? (3 de 3)
Guión: Cifra2

-----

PORTADA: Galactus atacado por una serie de superseres: Los 4 Fantásticos, Dientes de Sable, Sebastian Shaw, Harry Leland, Emma Frost...

-----

- Bien, gente... y ésta es la situación...

Ante Reed Richards, en la mesa de reuniones del Club Fuego Infernal, "Los 7 Magníficos" tomaban conciencia de lo desesperado de la situación.

- Y ese... "Galactus", dices que se llama... ¿es tan poderoso?

- Digamos que es lo más parecido a Dios que nos vamos a encontrar, Harry. Ni nuestros poderes combinados serían suficiente...

- Entonces, es hora de dar el siguiente paso... - añadió Raven.

Raven le alargó una serie de carpetas... carpetas con nombres de estudiantes de la Academia de Massachussets.

- Irene, gracias a su poder, identificó a una serie de humanos que podrían en futuros posibles convertirse en parahumanos... insistió en que estas personas debían estar ligadas a la Academia... y ya llevan algún tiempo aquí. Otros son ex - alumnos.

Reed examinó las carpetas... junto al nombre y datos personales - y una foto de cada sujeto - venía una serie de datos sobre los poderes que se habían manifestado en dichos futuros y cuáles habían sido ya graduados... pero el Club se había encargado de que mantuviesen el contacto y una cierta fidelidad...

Peter Parker: Estudiante de Química. Brillante historial. Fuerza y agilidad sobrehumana, aparte de poder "pegarse" a las paredes.

Matthew Murdock: Licenciado en Derecho. Sentidos hiperdesarrollados.

Bruce Banner: Licenciado en Física. Fuerza sobrehumana e invulnerabilidad.

Jennifer Walters: Estudiante de Derecho. Prima de Bruce Banner y prometida de Matthew Murdock. Mismos poderes que él.

Flint Marko: Estrella del equipo de Fútbol de la Academia. Aprobados raspando. Cada partícula de su cuerpo se convertiría en arena, que controlaría totalmente.

- Todo esto está muy bien... pero no sabemos del tiempo del que disponemos... supongo que también habeis "reclutado" más mutantes, ¿no?

Raven sonrió. A Reed no se le podía ocultar nada. Si él no lo deducía, Emma lo leía en la mente de los demás y le pasaba la información a su prometido.

- Convocaré una reunión en el salón de actos...

- Espérate a que "evolucione" a estos cinco candidatos... tenemos que empezar a entrenarnos ya.

-----

Pero Reed no durmió aquella noche. Se levantó de la cama, dejando a Emma dormida, se vistió y salió de la casa rumbo a los despachos de Mística y de Irene Adler.

Fue fácil superar las medidas de seguridad del despacho de Raven. Revisó todos los cajones. Nada. Comenzó con los archivos de ordenador. BINGO. El nombre del archivo, ambiguo, le llamó la atención. Lo abrió. Estaba protegido y pedía clave. Usó su clave maestra del Club Fuego Infernal. Acceso permitido. Y apareció una lista.

Antes de que pudiese empezar a leerla, la puerta del despacho se abrió. Era Irene. Nada sorprendente, sabiendo su poder.

- Hola, Reed... antes de que leas eso...

- Irene, había algo que no me encajaba... no me dejaba dormir...

- Lo sé, Reed. Nunca te puedo ocultar nada por mucho tiempo.

La lista que encontró Reed... incluía nombres... Víctor Von Muerte, Wilson Fisk, Norman Osborn... así varias decenas de nombres... y el encabezamiento de la lista era... "Objetivos".

- ¿Todos muertos, Irene?

- ¿Acaso no habrías matado a Hitler si hubieses sabido lo que iba a hacer?

Ante aquello... Reed Richards no se atrevió a replicar... pero claro, Irene Adler ya sabía cuál iba a ser su reacción. Sobre todo porque sabía que llegaría a leer un nombre en especial.

- ¿Ro... Robert Kelly?

- Era la muerte más necesaria. El momento en que lo dejasteis vivir, sellasteis el futuro de la humanidad.

No, no iba a llorar por un monstruo como Kelly.

- Pero, Irene...

- Hay algo que NUNCA he contado a nadie, salvo a Raven. Ahora voy a contarlo por segunda vez.

- ¿Te vas a justificar?

- ¿Acaso no quieres escuchar porqué he hecho lo que he hecho?

La verdad es que sí. Reed quería saber el porqué de todo este embrollo.

- Hace muchos, años, cuando era una adolescente, tuve la primera manifestación de mi poder. No fue la visión de un futuro amor, ni la visión de un pequeño accidente. No. ¿Qué quiso el buen Dios que fuese mi primera visión? El Holocausto. Hitler. La Segunda Guerra Mundial.

Reed dio un respingo. Por un segundo se puso en el lugar de Irene.

- ¿Conoces el mito griego de Cassandra, Reed?

- Sí.

- Cassandra era una oráculo que fue maldita por los dioses. Podría ver el futuro, pero no podría evitarlo porque nadie la creería. Así me sentí yo.

- Irene...

- ¡Tenía tan sólo 14 años, Reed! Un par de años después Hitler ascendía al poder. Para cuando tuve edad de hacer algo, se me identificó como una simpatizante comunista... y por lo tanto, era ignorada. Luego llegó la caza de brujas... sabía que llegaría y que irían a por mí por mi pasado activista... pero ya estaba preparada... ya conocía el Club Fuego Infernal... y fue fácil convencerles de mi utilidad.

- Pero juraste que nunca volverías a permitir algo así.

- Exacto. Al llegar al Club les propuse un proyecto. Por mis visiones, sabía quiénes accederían a gran poder en el futuro y si podrían ser captados o debían ser eliminados...

- No fue muy compasivo.

- No, no les di la oportunidad de cambiar... ahí están los casos de Victor Von Muerte... si no hubiese intervenido, habría sido tu mayor enemigo, Reed. Créeme. O Wilson Fisk... fruto de una infancia desgraciada y que se convertiría en el mayor señor del crimen organizado, responsable de atrocidades sin nombre... El resto de esa lista es igual. Todos Hitlers en potencia. Cegados por odios, egoísmo, avaricia... No podía arriesgarme a que un posible lavado de cerebro telepático por parte de Emma bastase.

- Irene, comprendo que...

- No, Reed... mañana te presentaré a alguien que habría sido una amenaza pero ha tenido la oportunidad de cambiar. Se llama...

-----

- Erik Lehnsherr...

- Reed Richards, encantado.

Ese hombre maduro de pelo canoso parecía contento de conocerle... Reed se extrañó ante esa actitud... ¿tan importante era él en este juego?

- Supongo que antes que nada, debería decirle que soy mutante...

- Por favor, tutéame... aquí hay confianza... además, nos jugamos demasiado como para ir con formalismos... si Irene me dice que confíe plenamente en ti, lo hago...

- Irene y yo... compartimos la misma obsesión...

Eric alargó su brazo izquierdo a Reed y mostró el inconfundible tatuaje de número de prisionero de un campo de exterminio nazi. Reed tragó saliva.

- Tengo control sobre las fuerzas magnéticas... a nivel global.

- Entonces eres realmente necesario, Erik.

-----

Pasaron semanas, meses de entrenamiento... y entonces llegó... brillante, ágil... los primeros que lo vieron pensaron que era un ángel... un enviado de Dios que anunciaba su llegada... no se equivocaban demasiado.

Sorprendente - hacia cierto punto - fue que eligiese como punto de aterrizaje la ciudad de Nueva York. Hasta cierto punto, ya que era el mayor núcleo humano de la Tierra. Gracias a Irene, allí ya le esperaban la primera línea de defensa de la Humanidad.

Al encuentro de ese ser llegaron Johnny - aunque estaba tullido, podía volar - y Erik... con un traductor automático diseñado por un estudiante llamado Forja.

- Soy Estela Plateada, heraldo de Galactus, señor del Universo, y vengo a anunciar su llegada a vuestro planeta. Apartad de mi camino.

- Verás, Estela... resulta que sabemos lo que tu amo viene a hacer aquí... y no nos gusta... es nuestro planeta y no vamos a dejar que se lo zampe.

- Johnny, cálmate, déjame esto a mí. Señor... éste es un planeta habitado, con vida inteligente que no puede huir... os suplicamos que reconsidereis vuestra decisión de consumirlo.

- El Amo no necesita reconsiderar nada... su voluntad es ley.

- ¿Podríais al menos, consultárselo?

Estela Plateada fue una vez un alienígena llamado Norin Radd... un ser de una raza extremadamente parecida a la humana... Norin evaluó rápidamente si debía consultar con su Amo ésta súplica.

- De acuerdo.

Y con esto, se elevó y desapareció.

- No te hagas ilusiones, Johnny... Irene ya dijo que esto no funcionaría, pero que marcaría una diferencia.

- ¿Qué diferencia puede marcar ésto?

-----

Irene se dirigió a los presentes, subidos a lo alto de la torre Sur del World Trade Center.

- Ahora, el heraldo volverá a la nave... allí informará a Galactus... la súplica y la visión de seres sentientes le recordará su pasado... se pondrá de nuestro lado.

- ¿Será suficiente? - preguntó Reed.

- Ni de lejos.

-----

Efectivamente, una hora después, el cielo se cubrió de llamas. Una figura plateada descendió hacia la reunión de superseres.

- Sabeis de lo fútil de vuestras intenciones, supongo.

- Sí, y que estás de nuestro lado.

Junto a ellos, apareció una figura extraña.

- ¿Quién es el cabezón éste? - preguntó Peter Parker.

- Ah, la última pieza del rompecabezas... - Irene hizo un amago de sonrisa... una sonrisa amarga.

Se acercó al ser, mientras Estela Plateada explicaba...

- Es un Vigilante. Un ser de una raza casi tan antigua como el tiempo, consagrada a registrar la Historia del Universo... si aparece aquí ahora es porque sabe que éste es un momento decisivo.

- Vigilante, sé que me escuchas... humildemente te pido ayuda para nuestro mundo...

Pero Irene sabía ya la respuesta... era un teatro en el que ella ya había leído el guión completo... era ella la que había cometido el error, y ella la que iba a hacer el último intento... sabiendo que era inútil de antemano.

- Mujer... ¿acaso sois dignos?

- ¿Qué? - interrumpió Ben Grimm.

- ¿Acaso no sois simplemente unos seres movidos por ambiciones? ¿No habeis matado a vuestro prójimo con excusas viles? El que llega ahora es un ser tan superior a vosotros como vosotros lo sois a los microbios...

- ¡Pero los microbios pueden matar al hombre!

- ¡Cállate, Ben!.

- Sí, es verdad. Los microbios pueden matar a un hombre. Pero él no es un hombre.

Ante aquello, Irene veía como inexorablemente iban cayendo las frases, las actitudes que ella había previsto. El momento a partir del cual ya no podía ver nada se acercaba...

Y llegó Galactus.

Majestuoso, con un aura de divinidad... se instaló junto a unos aparatos en la otra torre del World Trade Center. No dijo absolutamente nada... no había nadie allí que mereciera su atención.

Magneto se lanzó, descargando todo su poder, al igual que algunos jóvenes alumnos de la Academia... poco más que unos adolescentes... Ororo Munroe, los hermanos Álex y Scott Summers, Lorna Dane, Johnny Storm... lanzaron todo su poder... Ororo creó un pequeño huracán alrededor de Galactus... mientras tanto, un joven llamado Robert Drake enfriaba hasta límites extremos la maquinaria del ser... sólo para que el elástico cuerpo de Reed Richards impulsara como un tirachinas a Ben Grimm y destruyera de un sólo golpe lo construido.

Simultáneamente, llegó la segunda hornada del ataque... la fuerza bruta, combinada con el ataque psíquico... Lourdes, Jean Grey y Elizabeth Braddock intentaban entrar en el cerebro de Galactus... Jason Wyngarde procuraba una alucinación al ente, esperando enmascarar a los atacantes... Bruce Banner, Jennifer Walters y Clint Marko se lanzaban en un ataque físico a Galactus... consiguiendo que éste perdiese el equilibrio.

La reacción de Galactus no se hizo esperar... de la nave surgió un robot que comenzó el ataque a los defensores de la Tierra. Peter Parker, Sebastián Shaw, Víctor Creed y Matt Murdock eran los encargados de distraerlo para que los demás pudiesen seguir haciendo su trabajo.

Irene se giró hacia aquellos que tenían al lado... Forja, Emma Frost, Sue Grimm, Harry Leland, Raven, Pietro y Wanda Magnus. Pero especialmente a Forja.

- ¿Has evaluado ya su poder?

- Creo que sí.

- Pues diseña algo para matarlo1.

Irene sabía el riesgo que corría. El vacío que veía en el futuro podría ser dos cosas: imprevisibilidad o exterminio. ¿Estaban las opciones tan divididas que el futuro podía tomar tantas alternativas tan variadas? ¿O es que sencillamente, de verdad, como le había confesado a Reed, no había futuro?

Forja, Emma y Pietro comenzaron a usar sus poderes. Forja diseñaba un arma... Emma le enlazaba el pensamiento con Pietro, y éste, con los materiales habilitados - previstos por Forja, Reed y otros científicos punteros... ventajas de tener una precognoscitiva en el grupo - comenzaba a construirla... pero hacía falta tiempo... Wanda usaba su poder sobre las probabilidades con dos efectos... pasar inadvertidos ante Galactus (ellos eran la auténtica amenaza) e influir en la rápida construcción del arma. Tal era su control de poder tras los meses de entrenamiento conjunto.

Apenas prestaron atención ante los gritos. Jean, Lourdes y Elizabeth descubrieron por las duras que no se puede entrar en la mente de Galactus si él no quiere. Cayeron fulminadas, quedando inmediatamente en estado vegetativo.

- ¡Lourdes! - gritó Sebastián.

- Shaw... somos carne de cañón... TODOS.

Parker había sido el que había hecho el comentario... Segundos después, él y Matthew Murdock caían desde los más de 400 metros del World Trade Center, lanzados por el robot de Galactus. En un mundo paralelo, una tela de araña o un bastón habrían sido bastante para salvarlos del peligro.

En un mundo paralelo.

- Cinco menos... y acabamos de empezar... - Raven le puso la mano en el hombro a Irene y apretó.

El rayo de intensidad nova de Johnny fue desviado por una fuerza invisible hacia Clint Marko. Éste sólo tuvo tiempo de gritar antes de ser convertido en cristal fundido.

- Seis.

En ese momento, otros rayos surgieron de la nada... Estela Plateada se unía a los defensores. Galactus brilló por unos segundos, hasta quedar inmerso en una especie de capullo.

Su robot seguía causando una masacre, mientras tanto. Jennifer Walters apenas notó nada cuando su cráneo quedó destrozado entre las manos de la máquina. La rabia se apoderó de Bruce Banner, que se lanzó con una fuerza sobrehumana sobre el robot y emprendió con él la misma caída de Parker y Murdock.

- Eso nos da un respiro. - gritó Reed.

- ¡Ya está! - añadió Pietro.

Irene no supo qué decir... fue Reed quien se dirigió hacia Pietro, que comenzaba a encañonar al capullo.

- Espera, Pietro.

- Es demasiado poderosa... - añadió Forja.

El capullo empezó a temblar...

Reed comenzó a hablar alto, sabiendo que Galactus seguramente leía las mentes y estaba ya prestando atención. Miró de reojo al Vigilante. Su mirada inexpresiva fue la respuesta que Reed necesitaba.

- Galactus... lo que tenemos en nuestro poder es un arma definitiva, capaz de acabar contigo.

La voz de Galactus resonó en toda la ciudad.

- Es un arma formidable, lo leo en vuestras mentes... pero no sólo acabaría conmigo... sino que además acabaría con esta galaxia.

- Un precio pequeño por salvar al Universo de tu amenaza... si tenemos que morir, no lo haremos solos.

Irene comenzó a recordar. Meses de entrenamiento... meses de preparar a Pietro para su misión. Otros nombres que se arrepentía de haber incluido en la lista negra del Club.

TONY STARK, STEVE ROGERS

Estela Plateada comenzó a sentirse mal... su cobertura metálica comenzó a desintegrarse... la señal definitiva de que su poder cósmico comenzaba a volver a su dueño original, necesitado de él... además de cómo castigo por su traición. Sin poder cósmico que le sustentase, Norin Radd también cayó al suelo.

HENRY PYM, JANET VAN DYNE

En la calle, Bruce Banner notó como el robot relajaba su presión y se desintegraba, alimentando así a su amo. Demasiado tarde, pensó mientras la oscuridad le reclamaba.

DONALD BLAKE

En lo más profundo de su cerebro, enlazado con el de Irene por Emma, Pietro recibió la orden. Sólo sus dudas retrasaron unas milésimas la acción.

STEPHEN EXTRAÑO

Antes de que nadie pudiese reaccionar, Pietro apretó el gatillo.

CHARLES XAVIER.

Irene sonrió satisfecha mientras se volatilizaba. No había podido salvar la Tierra. Pero quizá había salvado al Universo. Una enorme bola de fuego creció y creció... y consumió la Via Láctea antes de que nadie en toda la Galaxia pudiese siquiera intuir qué pasaba. Hasta que en donde una vez hubo una serie de estrellas y planetas llenos de maravillas, sólo quedó un agujero negro que devoraba todo lo que se le acercaba. Tal fue su DESTINO.

-----

1.- Sí, un Nulificador Supremo

-----

Correo Alternativo

Señoras y señores... sé que este episodio no va a ayudar en nada a limpiar mi reputación de "asesino de héroes", pero como esto es "What If?"...

La verdad, espero que la saga os haya gustado... críticas, lo que se dice críticas, he recibido, y la gran mayoría - me enorgullezco al decirlo - son extremadamente positivas. Parece que especialmente os ha gustado la "originalidad" de "mezclar a Los 4 F con el Club Fuego Infernal"... y la verdad... yo no lo veo tan original... pero si vosotros me lo decís, quién soy yo para negarlo... ;)

Más sobre el tema. Personalmente, el título de esta saga tiene truco. Desvía la atención de la auténtica protagonista: Irene - Destino - Adler. Un personaje extremadamente molesto para la lógica de Marvel. Esta serie debería haberse llamado algo así como "¿Y si Destino actuase en consecuencia a sus visiones?". Un título estúpido, para qué vamos a negarlo. Por eso, para garantizar el factor sorpresa hacia el final de la serie, y dado que Los 4 F son los co-protagonistas (desde su óptica están narrados los acontecimientos), me decidí por matar dos pájaros de un tiro y juntar ambas historias.

Los 4 F son villanos aquí, no lo dudeis. Su principal motivación es el poder, combinado por una preocupación - de "buenos" - por los mutantes... Que tengan su corazoncito y que no sean asesinos despiadados los emparentan, por ejemplo, con Magneto. ¿Por qué no he hecho villanos más sádicos? Porque ni Destino, ni Mística lo son. Y ellas son el germen de su cambio de actitud.

De todos modos, con esto finiquito mi colaboración en "What If?" por unos meses... volveré a la colección el año que viene. Pero no os quedais sin vuestra ración mensual de presentes alternativos... me han echado una mano Ben Reilly (que hará una saga de dos números) y Henry Pym, con un número que será el que abrirá el 2.002 en esta colección. Yo volveré después, con la tan anunciada y cacareada saga sobre Los Vengadores (ya sabeis, dando un golpe de estado)... y es que me gusta tanto dar la vuelta a la tortilla... XDDD

Mientras tanto, entro en continuidad Marveltópica - si Peter y Carlos me aceptan - con una colección de la que nos vamos a encargar por turnos Dob y yo... "Neal Conan". No os cuento gran cosa - mejor, no os cuento nada - y que os sorprenda.

¿Cartas? Hoy no hay.

Bueno, hay un comentario de Jorge Cantero... le gusta What If? y Mutantes... pero considera que mato a demasiados personajes... hoy te he dado la razón ¿no? XD. Ahora en serio... las muertes en Mutantes son para dar un punto de partida a la colección, un cambio radical respecto a lo que ocurre en Marvel o en Marveltopía. Darle su propia identidad, vamos. El Spidey de Mutantes no se va a parecer en nada a ningún otro... sus motivaciones son distintas a partir de ahora... y eso es sólo un ejemplo. No hay muertes inútiles... sólo guionistas sin ideas. ;)

Rob, echo de menos tus cartas.

Cartas que puedes enviar donde siempre... cifra2es@yahoo.es

Así que hasta el mes que viene (me sigo encargando del correo, eso sí).

Alternativos Saludos de...

CIFRA2 / JESÚS ALONSO.

 
 
   
www.marvel.com
(1) All characters and the distinctive likenesses thereof are Trademarks of Marvel Characters, Inc. and are used with permission.
(2) Copyright © 2003 Marvel Characters, Inc. All Rights Reserved.