MarvelTopia
Marvel
 
 
PORTADA
Nosotros controlamos el poder. Nosotros somos el poder. Más que humanos. Más que mutantes... Nosotros somos: Telaraña
2055 Unlimited

2055 UNLIMITED #2
TELARAÑA
Guión: Xum

-----

Primer fragmento: Reportaje.

Extractos del capitulo 4.345.338 del National Geographic, dedicado a la raza alienigena conocida como "simbiontes":

"Curiosamente esta especie que es capaz de unirse a un anfitrion humano, además de todo el tipo de virtudes ya mencionadas con anterioridad, también retrasa el envejecimiento del sujeto.

El sujeto estudiado es Cletus Cassidy, anteriormente conocido como Matanza. Cabe recalcar que la supuesta edad del individuo es 87 años, sin embargo su cuerpo apenas ha envejecido y en una estimación basándose una serie de análisis de sangre se podría suponer que el sujeto apenas ha superado los 40 años."

"El primer simbionte, del que después nacerian el resto, fue traido a la Tierra por el héroe de los 80 conocido como Spiderman. Este se fundiria con el periodista Eddie Brock para formar el ente conocido como Veneno. Más tarde la parte alienigena de Veneno daría a luz a otros seis simbiontes... "

"El Gobierno afirma que los simbiontes están totalmente erradicados, sin embargo, como siempre ocurre en estos casos, los rumores especulan con la idea de que el simbionte original, Veneno, aun sigue vivo en alguna parte."

-----

Segundo fragmento: Mi padre.

Mi padre siempre me dijo que seria un perdedor toda mi puta vida.

Quizas no se equivocaba.

Yo nunca le creí. O por lo menos intente no creerle.

A veces es dificil mantener mi autoestima en minimos.

-----

Tercer fragmento: Mi otro.

Es facil darse cuenta de los errores de tu juventud una vez alcanzas la madurez.

Al principio culpé a Spiderman, Peter Parker, de todos mis problemas.

Él era la causa de todos los males.

Mas adelante me di cuenta de que me estaba comportando como un inmaduro.

¿Cuando deje de hablar en plural?

Hubo un momento de inflexión.

Fue justo cuando noté como la vida abandonaba el cuerpo estrangulado de Cletus Cassidy.

Mis manos rodeaban su cuello y en ese momento, como si un torrente de agua fria me hubiera golpeado, me di cuenta de lo que me habia convertido. Quizas fue la vision del palido rostro de mi antigua archinemesis, antes era terrorifico, ahora solo patetico. Parecia fragil.

Todo encajó. Un monton de ideas que habian rondado mi cabeza, casi entre sombras, se aclararon subitamente. Mi "otro" no me queria mas que como vehiculo para extender sus crias por toda la Tierra. Me sentí enfermo.

En las siguientes semanas intente matarle.

Ni que decir que me fue totalmente imposible.

Al final acabe aceptando al simbionte como si de una maldicion se tratase.

Y caí al arroyo...

-----

Cuarto fragmento: En el arroyo.

Los Angeles. California.

Los asientos del cine huelen a meado y semen seco. Ademas el brazo del sillon se me clava dolorosamente alrededor de la mitad de la columna. Varias filas mas arriba oigo como hombre alcanza el orgasmo. La pareja antes y cuatro pordioseros mas son los unicos que me hacen compañia en la sala de cine.

Proyectan por vigesimo octava vez una horrenda pelicula llamada "Scream 5". Un clasico del cine de quinceañeros histericos.

Realmente nadie viene a este cine de mala muerte a ver la pelicula. En mi caso es el unico lugar donde puedo dormir tranquilo sin miedo a que un grupo de pandilleros intente pegarme una paliza u otro vagabundo me robe lo poco que aun mantengo.

Intento encogerme y dormir. Tengo mucha hambre.

Nunca habia tenido tanta hambre. Decido que me es imposible dormir sentado y me tumbo en el suelo del cine. He gastado mis ultimos pavos a la hora de pagarme la miserable entrada de cine. Un sonoro efecto sube desde la boca de mis tripas.

Coloco mi cabeza sobre el suelo y me encojo. Noto algo humedo en mi mejilla, aparto el condon usado de un golpe.

Un cuarto de hora despues consigo entrar en un sueño poco reparador e incomodo.

-----

Un duro golpe en las costillas me despierta.

- Fuera, cerdo.- El propietario del cine ha decidido echar a todos de allí. Me levanto lentamente y miro cansadamente a este.- Piraos de aquí, escoria.

- Vale, vaaale.- Digo a la vez que levanto los brazos.

Otro dia mas igual.

Mi vida ha dejado de ser complicada. Antes me veia involucrado en peleas con tipos en pijama, pero de repente desaparecieron todos de la faz de la tierra por alguna ley estupida. Hoy en dia solo salvo de vez en cuando a alguien de ser atracado. Pero el resto del tiempo lo paso así, entre la mierda, comiendo mal y oliendo peor.

¿Por que?

Cuando nacio Veneno, Eddie Brock murio.

Se que no me explico bien.

La cuestion es que ya no tengo identidad, Eddie Brock no existe, al menos no puedo utilizar mi nombre real sin que se llame rapidamente a la policia. Todos creen que Veneno es un asesino en serie.

Imaginaos la escena de un hombre que va a una entrevista de trabajo y cuando le preguntan su nombre sonrie malevolamente y dice:

- Me llamo Hannibal Lecter.

O Norman Bates. La cuestion es que mi identidad como Eddie Brock esta muerta y enterrada. Por eso vivo entre la inmundicia.

Quizas podria salir del arroyo.

Quizas si realmente quisiera podria hacerlo.

Aun mantengo mi formidable fisico. En cierta forma el simbionte me ayuda a mantenerme en forma. De vez en cuando aun lo utilizo.

Cada vez menos.

Era francamente predecible. Realmente podia haber predicho que acabaria así, en el culo del mundo. Nunca pense que fuera esencial tener una identidad privada a la hora de ser un superheroe. El imbecil de Spiderman lo sabia bien. Tenia una mujer y una hija preciosa. Sabia que hay que mantener un equilibrio. Al haber arruinado mi identidad de Eddie Brock he jodi mi puta vida.

Antes no es que tuviera un gran trabajo (despues de mi fracaso como periodista) y la pension que le tenia que pasar a mi exmujer me dejaba con poco dinero, pero al menos tenia un hogar donde volver de noche.

Camino sin rumbo por un parque. Tengo un enorme agujero en el estomago. Pero nada de dinero para comprar.

-----

Necesito dinero para comprar comida.

Llevo alrededor de cinco dias sin comer... Mi simbionte me EXIGE que coma algo. Supongo que no me mantendra eternamente.

La vida era mas facil cuando odiaba a Spiderman. El odio me mantenia. Incluso despues de reconciliarme con él, la vida era mas facil que ahora.

Seguia una sencilla regla: "Defender a los mas debiles. Castigar a los malvados."

Estupida regla. Siempre fui una persona bastante imbecil. Creia que existia el lado de los malos y el lado de los buenos. El bien contra el mal.

Yo contra los malvados.

En mis ultimas semanas como "superheroe" descubrí que no existian los "malvados", solo era gente pobre que intentaba sobrevivir. Peces pequeños. Claro que habia gente grande como el Kingpin que se aprovechaba de todos, pero la gente que yo creia "malvados", los que solia apalizar no eran mas que debiles, atrapados por el miedo a la pobreza o por la adiccion a las drogas.

Siempre fui un gilipollas.

Mi estomago ruge de nuevo. No puedo seguir así. He de comer algo.

Veo una tienda de ultramarinos. Podria robar algo...

Robar.

Se que esta mal, pero el hambre que siento es mas fuerte que mi debilitada moralidad. He de hacer algo. Quizas cuando consiga algo de dinero podre volver a la tienda y pagarles lo que robe.

Si, eso hare.

A medida que me acerco a la tienda me felicito a mi mismo por no haber roto mi codigo moral.

El tendero me cierra el paso.

- Lo siento, amigo.- Dice sarcasticamente, por que por supuesto no lo sentia lo mas minimo.- No puedes entrar aquí.

- ¿Por que?

- No puede entrar.

Empujo al hombre con mi fuerza sobrehumana. Quizas ya no la controle tanto, por que se estrella contra una pila de latas abollandolas todas.

Le esta merecido.

Cojo algo de comida. Primero una barra de pan y empiezo a comer. La gente se empieza a agolpar en la entrada, temerosos de que vaya a hacerles algo pero mirando por curiosidad para ver que hacia. Engullo un monton de chocolatinas.

Oigo los susurros de los curiosos a mis espaldas.

- Que pinta...

- No se de donde habra salido...

- ¿Alguien tendria que llamar a la policia? ¿no?

- El señor Mackie no tiene pulso. Llamen a una ambulancia...

Sigo tragando todo lo que puedo.

De repente me siento muy mal por la muerte de ese señor. De todas formas debia ser muy viejo, tampoco le habia empujado tan fuerte.

Recogo un monton de dolares arrugados y salgo corriendo.

Mas tarde busco un callejon donde dormir.

Y de nuevo entro en un sueño intranquilo y no reparador.

-----

El tiempo pasa sin que ocurra nada digno de mencion. La misma hambre y la misma mierda.

Una de las ventajas de vivir en el arroyo es que el tiempo pasa mas rapidamente, sin darte cuenta puede llegar a pasar un mes.

Tampoco calculas muy bien el tiempo transcurrido.

A mi me parecia que solo habian pasado un par de semanas cuando esa mujer bajo de una limusine. Yo estaba sentado en una esquina, apoyado en la pared y casi dormido, cubierto por un carton viejo.

Lo primero que ví fueron unas largas y sensuales piernas apoyarse en el escalon. Llevaba unas medias casi transparentes seguidas de una corta falda negra, una americana azul. Era una mujer muy guapa, caminaba como si estuviera por encima de todo el mundo.

Sin dudarlo se acerco directamente hasta mí.

- Me ha costado mucho encontrarte.

Yo no respondia por que aun estaba fijandome en sus rasgos. La encontraba enormemente familiar, pero no recordaba exactamente de donde. Tambien note que la adrenalina se incrementaba sustancialmente en mi simbionte, como si el se diera cuenta de algo que yo no sentia.

- Tienes un aspecto deplorable, Eddie.

Era una mujer muy sensual. Unos preciosos labios, unos ojos brillantes y una mata de pelo rubio que le daba un aspecto de amazona. Su tipo tambien era perfecto, tenia unas curvas capaces de quitarle el aliento a cualquiera.

- Desde que tuvimos noticias de tu ultima aparicion hemos registrado incansablemente Los Angeles. No nos lo pusistes facil.

- ¿Quien eres?

La hermosa mujer lanza una fuerte carcajada.

- Creí que ya me habias reconocido.- Admite.- ¿Que no eres capaz de recordar ni a una de tus HIJOS?

Los Hijos de Veneno.

Debia protegerme. Me levanto de un salto mientras que me transformo totalmente en Veneno, noto como mis rasgos cambian para mostrar el semblante sonriente con los enormes dientes y la larga y viscosa lengua.

Ella sonrie como si ello ya entrara en sus planes y hace que su propio simbionte entre rojo y amarillo la recubra por completo. Sus sensuales formas se ven reafirmadas.

Estoy demasiado debil, pero me preparo para la confrontacion.

Ella sonrie, sabiendo que tiene la batalla ganada de antemano.

-----

Quinto fragmento: Asuntos de familia.

Los Angeles. California.

El primer golpe es en la cara. Salgo impulsado hacia atras.

Ella se aprovecha de mi subito desequilibrio para tumbarme en el suelo. En un par de segundos me recubre con su propia telaraña.

Hace mucho tiempo la Fundacion Vida separo y desarrollo cinco partes de mi simbionte. Crecieron hasta convertirse en algo parecidos a mis hijos. Antes de que fueran demasiado fuertes lo mate.

O eso creí. Mas adelante "resucitaron" de la nada. Secuestraron a mi parte humana.

Querian obligarme a que les ayudara a controlar su "otro yo".

Una de ellos, Donna, se volvio totalmente loca y mató a todos los anfitriones. Peleo contra mí y yo le vencí. Supuse que fue encarcelada.

Ahora esta sentada encima de mí. Sonriendo.

Hace tiempo hubiera roto facilmente su tela de araña, pero ultimamente estoy mucho mas debil de lo normal. Ella lo sabe.

- He venido a hablar, papa.- Su simbionte se desprende de la cabeza, dejando al descubierto su preciosa melena.- Cara a cara.

- NO.- Mi lengua salpica de babas mi propia barbilla.- TE MATARE. MATARE A TODOS MIS...

- Callate, viejo.- Donna parece enfadada.- Estoy harto de tí. Antes te odiaba... Ahora me das pena...

Hago un terrible esfuerzo por liberarme de las telarañas. Todos los musculos de mi cuerpo se tensan y la desgarran. Por desgracia Donna simplemente añade mas telaraña y me mantiene cautivo.

- No tienes por que vivir así.- Continua Donna.- Es realmente absurdo que una persona con tu potencial deba vivir en la pobreza extrema.

Mantengo un respetuoso silencio. Supongo que dentro de poco me soltara un increible plan para hacerse rica rapidamente. Hace tiempo me visito uno de los viejos enemigos de Spiderman, no se como habia logrado localizarme y me propuso formar parte de los NUEVOS SEIS SINIESTROS. Me reí de él. Por supuesto se ofendio. Mas adelante me entere que su grupo habia sido atrapado facilmente por uno de esos grupos de mutantes.

- Quiero que trabajes para mí.

- HA HA HA HA... ¿Realmente crees que caere tan bajo?

- Sinceramente, cariño, creo que ya has caido muy bajo.

-----

Solo la furia es capaz de compensar mi lamentable estado fisico. De un subito golpe empujo a la mujer lejos de mí. Rompo la red.

Por un instante considero el atacarle. Pero lo pienso mejor y salgo huyendo.

Subo por el tejado trepando. Muy rapido.

Ella lo es mas.

Salto de techo en techo, balanceandome cuando hace falta. Me gana terreno por segundos. Si no fuera porque lleva de nuevo el simbionte cubriendole la cara juraria que se esta riendo de mí.

Durante un instante la pierdo de vista.

Reaparece justo delante mio.

- No hay escapatoria. Soy mas rapida que tu.- Proclama.- Quizas tu fueras mas fuerte... En tus buenos tiempos, me refiero.

- Aun soy el mejor.- Le espeto. Mis tripas rugen. Sentia hambre. Me encontraba debil. No podia enfrentarme a ella. Debia escapar.

Llevaba años sin ejercitar mi simbionte.

Antes de que pueda reaccionar me coloca algo en el cuello.

Noto como la inconsciencia se apodera de mí.

-----

Sexto fragmento: Al borde del abismo.

Me despierto con una dolorosa sensacion que me recorre todo el cuerpo.

Abro los ojos.

- ¿Como te encuentras, Eddie?- Es ella de nuevo. Esa mujer turbadora.

No le dirijo la palabra. En este momento es la persona que mas odio de este mundo. Nunca fuí tan debil... Ella se ha aprovechado de esa debilidad para capturarme y Dios sabe lo que querra hacerme.

Estaba atrapado en una celda de sonido.

Un solo foco le ilumina, el resto de la habitacion permanece entre las sombras.

- No estes enfadado conmigo. No te deseo ningun mal.- No me creo ni una palabra. Si pudiera mataria a aquella mujer con mis propias manos.

- ¿Que quieres de mí?- Le pregunto, totalmente enfurecido.

- Cada cosa a su tiempo... Dejame que te explique que ha ocurrido desde que desaparecistes.- Dice la mujer.- Despues de ser capturada y tras un periodo de acondicionamiento en el que aprendí a controlar a mi simbionte, me pusieron a trabajar en misiones de espionaje, incluso despues de la aparicion del decreto que prohibia actuar a los superheroes seguian recurriendo a mí. Hubieron un par de misiones en las que tuve que eliminar a "elementos conflictivos". El resto de simbiontes obtuvieron nuevos anfitriones, sin embargo ninguno de ellos tenia un control equiparable al mio. Logicamente fuí elegida lider. Pero eso no es todo. Nuestros "otros" llegaron a su periodo fertil, se reprodujeron. Al contrario de como habia ocurrido hasta entonces decidimos unirnos solo a una serie de individuos elegidos con mucho cuidado. La cupula de poder era nuestro objetivo. Se podria decir que formamos una secta o una logia secreta. Cada vez teniamos mas poder. Al desaparecer los mutantes y demas superheroes nuestros planes se vieron enormemente favorecidos, si no sonara pretencioso se podria decir que controlamos el mundo entero. Velamos por su seguridad.

No daba credito a sus palabras. Mis hijos...

- Estas totalmente loca.- Le espeto.

- Al contrario, Eddie. Eres tu el que no se da cuenta del increible potencial que has tenido ante tus ojos. Tu eres el loco.

- No... No puede ser...

- Te queremos Eddie. Queremos que te unas a nosotros. Eres el mayor de nosotros, el mas viejo, el patriarca y queremos que formes parte de la Telaraña.

Mi fe se desmorona. Mi pequeño mundo desaparece. Oigo de nuevo una voz apagada.

La voz de mi otro.

Me susurra. Me pide que le haga caso...

Me pide que le perdone.

- Unete. Nosotros somos aquello que siempre has buscado. Sin nosotros no eres nada.- Dice Donna.

Mi cabeza esta confusa. Miro a los ojos de Donna. Se que dice la verdad. Fuera solo soy un pordiosero o un vengador sin causa. Aquí dentro tengo algo venido mas alla de mis sueño.

Por primera vez en mucho tiempo veo las cosas claras. Este es mi destino.

- Unete a nosotros.- Repite Donna.

Mi voz tiembla ante la importancia de las palabras que voy a pronunciar.

- De acuerdo.- Digo.

Donna sonrie.

- Bienvenido.- Las luces se iluminan, a mi alrededor habian cientos de personas, jovenes, mayores, hombres y mujeres... Todas ellas sonrien.

Donna empieza a aplaudir, siendo seguida de inmediato por el resto de personas presentes.

El ruido resulta ensordecedor.

Siento un estremecimiento desconocido recorriendome.

Y sonrio.

Por los poros de mi piel fluye el simbionte y me recubre por completo.

- NOSOTROS SOMOS VENENO.- Grito al borde del delirio.

Los cientos de personas tambien sonrien y una especie de ola recorre la sala al transformarse gradualmente todos los presentes. Cada uno totalmente unico. Cada uno formado por un simbionte y un huesped humano.

- Veneno ha vuelto para quedarse. Hemos vuelto.- Murmuro.

Fin.

 
 
   
www.marvel.com
(1) All characters and the distinctive likenesses thereof are Trademarks of Marvel Characters, Inc. and are used with permission.
(2) Copyright © 2003 Marvel Characters, Inc. All Rights Reserved.